La vida del príncipe Harry y su mujer, Meghan Markle, cambió durante los últimos meses. Luego de obtener el permiso para dejar de formar parte de la Corona británica, la pareja se mudó junto a su hijo a Canadá. Sin embargo, no estuvieron mucho tiempo allí y rápidamente volvieron a cambiar. Esta vez el destino es Los Ángeles y parece ser definitivo ya que ambos estarían pensando en continuar con sus vidas dentro de la industria de Hollywood.
Pero mientras eso sucede hay otro asunto del cual Meghan debe hacerse cargo y es la denuncia que hizo a la Asociación de Diarios de Inglaterra por la filtración de cartas privadas que hizo el medio Mail on Sunday. El hecho se remonta a 2018 cuando el diario publicó fragmentos de una carta que ella le escribió a su padre, Thomas Markle, con quien no mantiene una buena relación.
Para llevar adelante su denuncia tanto Meghan como Harry contrataron al abogado especialista en gestión de reputación y privacidad, David Sherbone. No es la primera vez que él trabaja para la familia ya que fue el representante legal de Lady Di, madre de Harry, antes de que ella falleciera. Además también trabajó con otras personalidades como Donald y Melania Trump, Sir Paul McCartney, Michael Douglas, Jude Law, Kate Winslet, Sienna Miller, Kate Moss y Elton John.
Según trascendió la acusación contra el medio es por “el mal uso de la información privada, violación de la protección de datos e infracción de la acción de derechos de autor”. La primera audiencia al respecto ya tuvo lugar pero por la pandemia del coronavirus debió realizarse de manera virtual. Por el momento son solo las primeras etapas de un proceso que tomará varios meses para resolverse pero que Meghan busca ganar. El propio Harry contó que el suceso la afectó mucho y verla así le recordó lo que tuvo que pasar su madre con relación a la prensa durante sus últimos años de vida. De hecho, ese fue uno de los motivos principales por el cual decidieron dejar sus puestos como miembros de la familia real y mudarse a América.