Son varios los países que, estando gobernados por mujeres, se encuentran gestionando muy bien la crisis provocada por la pandemia. En todos los casos, decidieron actuar desde un comienzo, lograron hacer miles de tests y así pudieron aislar preventivamente a los enfermos, evitando un contagio masivo de la población. También son aquellos países en los que se registra un número proporcionalmente más bajo de muertes por Covid-19.
Una de estas líderes es la dinamarquesa Mette Frederiksen, quien el 15 de abril pasado ya reabrió guarderías y escuelas para niños de hasta quinto grado. La taiwanesa Tsai Ing-wen aprobó 124 medidas para impedir la propagación del Covid-19 en enero, cuando apenas se habían registrado un puñado de casos en Wuhan, China continental, por lo que no tuvo que recurrir a las medidas de aislamiento que hoy atraviesan el mundo. Ing-wen fue invitada a escribir en la revista Time para contar la experiencia de cómo enfrentó su país el virus. “Si tienen que salir, asegúrense de usar máscara”, recomienda en su cuenta de Instagram, donde se la puede ver desde tomando café en su casa hasta trabajando en su despacho.
Angela Merkel en Alemania fue una de las primeras líderes mundiales en advertir la gravedad de la pandemia y, en un inédito mensaje a la Nación, pidió a los alemanes que tomen en serio la amenaza, porque si no, podría infectarse hasta el 70% de la población. Confiaron en ella y hoy el país tiene muchos menos casos que sus vecinos.
La islandesa ambientalista y licenciada en Letras Katrin Jakobsdóttir –y líder feminista además–, dispuso desde un comienzo la realización masiva de tests, no solo a quienes tenían síntomas. Electa en diciembre y una de las más jóvenes, con 34 años, la finlandesa Sanna Marin, es la primera ministra más joven del mundo. Puso a decenas de influencers de las distintas redes sociales a distribuir las medidas de prevención, evitando las fake news y conteniendo la pandemia. En su cuenta de Instagram mostró el viernes pasado una videoconferencia respondiendo directamente consultas de chicos de Finlandia. “Tenemos que tolerar la incertidumbre en medio de la crisis”, expresó. La noruega Erna Solberg siguió los pasos de Marin y realizó una conferencia de prensa infantil. En sus redes, Solberg promueve que los ciudadanos se bajen una aplicación que permite llevar registro de datos útiles de cada ciudadano en su celular.
