Esta noche habrá aplausos y una emoción adicional a la que provocan cada trofeo que se entrega en las ediciones de los premios Goya, que este 11 de febrero tiene lugar en Sevilla. La muerte de Carlos Saura sucedida –o informada– ayer al mediodía (hora de Argentina) sorprendió a los organizadores de la gala porque él estaba invitado para recibir ante los presentes el Goya de Honor 2023 como reconocimiento “por su extensa y personalísima aportación creativa a la historia del cine español desde fines de los años 50 hasta hoy mismo”, detalló la Academia de Cine de España.
“He tenido suerte en la vida haciendo aquello que más me atraía: he dirigido cine, teatro, ópera y he dibujado, fotografiado y pintado toda mi vida, y espero seguir haciéndolo”, decía Saura en una carta que leyó su hija Anna Saura junto a su hermano y productor Antonio Saura, cuando retiraron el Goya con antelación dado que su padre estaba recuperándose de una caída y previendo una complidación de su salud. “Recibo con mucha alegría y agradecimiento este galardón que me otorga la Academia, a la que también quiero agradecer la gran labor que hace promoviendo y protegiendo nuestro cine y nuestra cultura, que es de las cosas más importantes que tenemos”.
Con un posteo en su red social, la Academia que lo premió comunicó su muerte: “La Academia de Cine lamenta profundamente comunicar el fallecimiento de Carlos Saura, Goya de Honor 2023. Saura, uno de los cineastas fundamentales de la historia del cine español, ha muerto hoy en su domicilio a los 91 años, rodeado de sus seres queridos”.
Legado. Carlos Sura fue cineasta, escritor, fotógrafo, dibujante, director de escena y amante de los musicales. También fue el yerno de Charles Chaplin dado que se casó con Geraldine Chaplin, quien fue además protagonista de muchas de sus películas. En su filmografía se encuebtran títulos como Cría cuervos, película que ganó la Palma de Oro de Cannes 1976 –compartido con La marquesa de O, de Éric Rohmer–, y que lanzó a la fama a un muy pequeña Ana Torrent. También La caza, Peppermint Frappé, Ana y los lobos, La prima Angélica, Mamá cumple cien años, Deprisa, deprisa; con Antonio Gades y Cristina Hoyos como protagonistas filma Carmen, Bodas de Sangre y Amor Brujo, universalizando todavía más el flamenco y el universo gitano; en esa línea le siguen también Flamenco, flamenco, Sevillanas –donde convence de filmar a Lola Flores quien ya estaba enferma y moriría antes del estreno–; y además Tango, El séptimo día, Io Don Giovanni, y Goya en Burdeos, entre otras.
Según Saura explicó alguna vez, él ha filmado tres tipos de películas. “La primera sería un cine con los pies en la tierra, con una realidad concreta como Los golfos, La caza, Deprisa, deprisa; otras más creativas como La prima Angélica, y luego el más musical (...) Y también hay una cuarta categoría porque me han preocupado muchos artistas que han influido en mi vida, como Goya, autores de literatura española, y que son una especie de ensayos personales”.
Por supuesto, Saura acumuló reconocimientos en sus 91 años. como la Medalla de Oro de la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas de España, y también condecoraciones de los gobiernos francés e italiano, y del Estado español.