Desde Córdoba
Durante su breve estadía en la ciudad de Córdoba, Obama se reunió con un centenar de empresarios en el Hotel Quorum en las afueras de la capital provincial, ante quienes hablò una hora destacando la importancia que tienen los líderes mundiales en todos los temas relacionados con el cambio climático. Luego se encontró por separado con otros seis empresarios espónsores del encuentro, entre ellos, Sebastián Ponceliz, CEO de Odyssey Group US; María Pía Astori, presidenta del Grupo Astori Palmar, y Martina Amengual, del grupo Amerian, además de Enrique Pescarmona y Juan Schiaretti, con quienes departió por otros 20 minutos, mientras el Hotel Quorum era centro de un gigantesco operativo de seguridad.
Los empresarios recibieron indicaciones especiales: dress code informal y por nota se les pidió “mostrarse tranquilo y natural”, una aclaración que sorprendió a dirigentes de muchas compañías que bromearon sobre la posibilidad de que algún ejecutivo pudiera actuar como un fanático. También se les aclaró que únicamente el fotógrafo designado por la comitiva de Obama tendrá acceso a todas las reuniones. Y, por supuesto, se les pidió que se acreditaran por la mañana por las medidas de seguridad que dejaron fuera del evento a decenas de asistentes, entre ellos periodisttas provenientes de distintos puntos del país.
Las especualaciones sobre el costo que tiene acceder a unos minutos con el mandatario, invadieron los pasillos de la cumbre que se caracterizó por el tumulto permanente de científicos, organizaciones no gubernamentales dedicadas al cuidado del medio ambiente y funcionarios de Gobierno. Las cifras van desde los US$ 50 mil a los US$ 100 mil, con un cachet total para Obama de unos US$ 450 mil por participar en la cumbre.
En el evento organizado por Advanced Leathership Foundation, el Ministerio de Agua, Ambiente y Servicios Públicos y el Gobierno de Córdoba, también estuvieron presentes ejecutivos esponsóres como Patricio Farcuh (ver recuadro), Boston Seguros y Air Europa. Tuvieron una fuerte presencia representantes del BID, la OEA, y la Corporación Financiera Internacional.
A último momento, se sumaron invitados del sistema financiero y construcción, que aseguraron tener cierta “curiosidad por la presencia de Obama” y lograron convencer a los responsables de la seguridad para ingresar al hotel. Después de una hora de diálogo, lograron pasar los molinetes que limitan la entrada sólo a quienes cuentan con una acreditación que se debía tramitar con dos semanas de anticipación.
Ya en el escenario las palabras de Obama pueden resumirse en un concepto: “Ninguna nación puede resolver los efectos del cambio climático en forma solitaria. Los políticos pueden firmar o no acuerdos, pero todos tenemos que dar nuestra parte, especialmente los jóvenes. No podemos condenar a nuestros hijos y nietos a un futuro que no pueda repararse”. Al cierre de esta edición, unos cien invitados lo esperaban para un cóctel en un hotel de Recoleta. Y hoy se encontrará con Macri.
Del bajo perfil al escenario
Patricio Farcuh, presidente y CEO de OCA, fue uno de los personajes curiosos por su reaparición en público después de haber mantenido un perfil bajo luego de la fuerte pulseada con organismos del Gobierno que trabaron un embargo y aseguran que la empresa postal más grande del país atraviesa una “crisis financiera”. Por ese motivo, la AFIP había trabado una cuenta de pago de Mercado Libre, una de las principales compañías que tiene como cliente. En su presentación, Farcuh se refirió a los cambios sociales y culturales que llevaron a la empresa a avanzar apostando a la tecnología que permita saber dónde está un distribuidor en tiempo real que ya está en marcha y será potenciado por la compañía en lo que resta del año para alcanzar el 100% de la cobertura del servicio.