En menos de un año ganó terreno en el mundo de la moda local y hoy su nombre suena fuerte. Cultor de lo artesanal y la moda sustentable, se transformó en el predilecto de muchas de las famosas argentinas. Incluso a la hora de vestirse de blanco y caminar hacia el altar. Aun con algunas de las críticas que tuvo, Javier Saiach insertó sus diseños en el mercado de lujo con proyección internacional y se instaló en el mundo de la moda para quedarse.
Su estilo artesanal y romántico, sumado a su meticulosidad y obsesión para que todo quede tal cual se planeó, es lo que lo hace ser el más solicitado del momento por las celebridades que saben que pueden descansar en sus manos. Vanesa Mansilla se sumó a la lista cuando este jueves lució un vestido suyo para su casamiento por civil con Carlitos Tevez. Y a la hora del cierre de este diario, volverá a lucir una creación de Saiach para entrar a la iglesia de Puerto Camacho, en Uruguay. También vestirá a las madres de los novios y a sus hijas.
La primera en dar el “Sí, quiero” con un diseño Saiach fue Isabel Macedo, para quien este talentoso correntino diseñó una pieza íntegramente hecha a mano inspirada en su colección gaucha. También recibió críticas, pero logró que de ese vestido se hablara incluso más que de la fiesta propiamente.
Sofía Zámolo, quien se casó a principios de mes con José Félix Uriburu en Punta del Este, vistió un modelo del diseñador de encaje bordado a mano sobre tul y con transparencias.
Suceso. Las galas también son terreno ganado por este correntino. Juliana Awada apareció apenas unos días después de la boda de Macedo con un atuendo similar, pero en negro, en una cena de honor que Macri ofreció al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. Susana Giménez lo eligió para que se encargara de su vestuario en la gráfica de su regreso a la tevé. La producción se contactó con Saiach con una propuesta: emular un vestido del diseñador libanés Elie Saab. “Me dijeron que ella obviamente se podía comprar un Elie Saab auténtico pero que prefería que la vistiera un diseñador argentino, y que creían que yo era el único que podía hacerlo”, reveló entonces Saiach.
Mariana Fabbiani es otra de las que lo eligieron, y usó un original diseño con un pájaro bordado en la ceremonia de los Martín Fierro. “A Javier lo conocí en 2014; yo estaba buscando algo diferente y nuevo y ya lo venía pispeando. Me gustó su forma artesanal de trabajar. Cada vestido es una obra de arte. Me genera mucha admiración. Está en cada detalle. Y sus modistas son impresionantes. Además, él me deja opinar y jugar más allá de que tiene carácter y una identidad fuerte. Tiene mucha experiencia y mucho futuro. Una se siente una reina usando sus diseños. Es un artista de la moda”, relató a PERFIL Fabbiani.
La novia de Eduardo Costantini, Lucía Radeljak, es otra de las que ya tienen diseños suyos: en la gala del Museo de Bellas Artes estrenó uno en tono natural que fue muy elogiado.
Saiach empezó estudiando arquitectura en Paraguay, adonde viajó desde Corrientes apenas terminó el secundario por el trabajo de su padre. Pero tras cinco años de facultad, dio un giro y se volcó al diseño de indumentaria. Con 23 años, empezó vistiendo a amigas hasta que su jefe, que tenía una marca de ropa, le propuso poner un perchero con sus prendas. Empezó con 16 piezas que eran jeans, sacos y trenches pintados a mano o bordados con piedras. El éxito de ese perchero con su nombre fue inmediato, a tal punto que al año y medio ya vestía a Araceli González, y su hija Flor fue incluso una de sus modelos cuando Saiach comenzó a hacer pie en Buenos Aires.