Román Viñoly, hijo del famoso arquitecto uruguayo Rafael Viñoly, abrió por primera vez las puertas de la casa que su padre diseñó en Punta del Este y que utilizó los últimos veranos hasta que falleció en marzo de 2023. Allí Román fue el anfitrión de una comida para un grupo de invitados especiales a quienes presentó la última creación de su padre Rafael: un proyecto que ya está en marcha, Médano El Pinar. Este es el primer desarrollo residencial multifamiliar –de lujo sostenible, explicó– sobre la playa de Montevideo. Una inversión de cien millones de dólares.
Muchos de los invitados se interesaron por conocer detalles del proyecto, y también hubieron otros que estaban entusiasmados en conocer la propiedad que Rafael Viñoly pensó para pasar sus veranos en Punta del Este. Y era lógico. A pesar del historial de proyectos internacionalesque llevan la firma Viñoly y que dan idea de los conceptos que este arquitecto manejaba para sus creaciones, era una persona discreta respecto de su intimidad. Por eso, ¿quién no querría conocer cómo es la casa que un arquitecto famoso diseñó para sí mismo?
Legado. Román Viñoly sostuvo que “el legado de Rafael es una forma ética de la práctica de la arquitectura basada en la responsabilidad social. Las construcciones trascienden la vida de las personas y pertenecen, verdaderamente, a las comunidades donde están ubicadas. Mi padre asumió esa responsabilidad en todos los proyectos”. Y continuó: “Quiero realizar su última obra maestra como él hubiese querido realizarla”.
Parte del legado de Rafael Viñoly es también una fundación que lleva su apellido, para que sea un compromiso de familia. A fin de noviembre de 2023 y para recaudar fondos, en el Carnegie Hall de Nueva York se hizo un concierto homenaje a “el extraordinario arquitecto nacido en Uruguay cuyos edificios funcionales e inspirados en el contexto dejaron huella en seis continentes”, como lo describió la revista Architectural Digest.