Se está cumpliendo una semana del alzamiento policial que nos tuvo en vilo a todos, empezando por el gobierno de la provincia de Buenos Aires, y el Gobierno Nacional, la idea es ver qué está pasando en las alturas de la conducción bonaerense en cuanto a la Policía. Yo diría que hay dos palabras clave en la gestión Berni en este momento: descontrol, que es lo que hay que superar, y despolitizar, que es lo que habría que lograr según la gestión de Sergio Berni.
Pero ¿Qué significa despolitizar? A ver, por un lado, fortalecer la línea de mandos de comisarías, Infantería, Caballería, todo lo más ligado a lo que sería la crema de la Policía Bonaerense que Berni da por hecho que le responde y le respondió durante todo el conflicto. Aislar a los que no le respondieron a los sublevados. A eso apunta exhibirlos públicamente, incluso diciéndoles que estaban drogados y que estaban alcoholizados mientras se movilizaban, y ubica entre ellos a retirados, sancionados y otros personajes que no llegan a más de 1500, según las cuentas que hace el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires.
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Tercer punto: para despolitizar a la Policía. Encolumnar a las policías municipales a las que en la propia fuerza se les llama "pitufos" porque la mayoría se visten de azul y que muchas veces no saben bien a quién responden, si responden a las comisarías, si responden a las regionales, si responden a los intendentes, a quién es que responden. Eso desanima a la cadena de mandos de la Policía Bonaerense. Lo que busca Berni es ganar confianza en los cuadros superiores y medios, y para esto utiliza los medios, entre otras cosas, para sobreactuar una pelea que le sale bien porque es bastante genuina. Pero también sobreactúa la pelea con el ala progre del Gobierno nacional. Eso tiene un mensaje directo hacia una fuerza que no es básicamente desde el punto de vista ideológico progresista.
Berni sabe también cuál es su problema. Se lo han dicho comisarios, uno de ellos, de su confianza, describe los problemas de Berni de esta manera: es demasiado kirchnerista para caerle bien a los policías, es demasiado milico para garantizarnos que tiene el apoyo firme de La Cámpora, es demasiado médico como militar para exhibirse como un comando. Pero bueno, logró "algo" gracias al presidente Fernández: el aumento. La plata no es todo, pero cómo ayuda.
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El reclamo de equipararse con la Policía Federal viene de 1943 y esa es la gran bandera. Ahora Berni promete una transformación en serio. No es el primero que lo hace ni sería el primero en pasar de largo. Pero bueno, esto recién empieza. Sigan ustedes.
