REPERFILAR
Análisis

El año de la pandemia ¿Y el gobierno?

El único tema del 2020 fue la pandemia. Argentina quedó entre los países con más muertos por millón de habitantes, con la mayor caída económica del mundo y con menos vacunas que el resto de la región. El desempeño del gobierno argentino ha sido lamentable.

El año de la pandemia: eso, y prácticamente solo eso, es el año que se está yendo. El gran tema, casi el único tema de 2020, la pandemia ha sido, es, no solo un problema sanitario sino también económico, social y cultural de una dimensión y unas consecuencias insospechadas. 

En un año así, un gobierno, cualquier gobierno, puede intentar llevar adelante muchos proyectos, pero será principalmente juzgado por la respuesta que dio al gran problema. La mejor idea, la ley más transformadora, la reforma más original carecerán por completo de valor si no se acierta en la gestión de un acontecimiento que ha trastocado desde todo punto de vista la vida de la sociedad. Ante ese acontecimiento, todo lo demás es accesorio. 

De un modo u otro, todos los gobiernos han fracasado, en la primera o en la segunda ola. También fracasó el nuestro, de un modo hiperbólico. De las fanfarronadas presidenciales de los primeros meses solo quedan escenas que serían dignas de la parodia si no resultaran patéticas. 

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Argentina casi duplica la caída de las exportaciones a nivel mundial 

Argentina termina el año con algunos de los peores indicadores -casi mil muertos por millón de habitantes, lo que coloca a nuestro país en el grupo de los más afectados, peor aún que Brasil y que México. 

El producto bruto caerá en Argentina más del 10% en el año: la mayor caída de actividad económica por causa de la pandemia en todo el mundo. Los estudiantes argentinos han perdido un año completo de asistencia a clases, lo que no ha ocurrido en prácticamente ningún otro país. 

Y, por fin, el acceso a las vacunas, llave de bóveda con la cual poner fin a esta pesadilla, parecería un compendio de incompetencia e ignorancia, si es que no hubo, además, pretensiones de corrupción. Como era previsible, no todos los países tendrán la misma capacidad de acceder a ellas. 

Final recargado

Los países ricos se garantizaron más de una dosis por habitante: casi nueve en el caso de Canadá, siete en el de los Estados Unidos. Brasil, por su parte, ya comprometió 246 millones de dosis, más de una por persona, México 210 millones para 126 millones de habitantes; Chile más de 80 millones para 18 millones de habitantes. 

Argentina tiene, hasta el momento, comprometidas 25 millones de dosis de la vacuna Sputink-V, es decir, apenas una dosis cada dos personas. Y, a diferencia de la mayor parte de los gobiernos, que han optado por comprometer entregas con varios laboratorios, Argentina, hasta el momento, lo ha hecho solo con uno.  Aparentemente, Pfizer impuso “inaceptables condiciones” a nuestro país que no exigió ni a Chile, ni a México ni a Brasil.

El desempeño del gobierno argentino ha sido, hasta el presente, lamentable. Nada indica que vaya a mejorar. 2021 no se presenta como un año mejor que el que termina.