Hay un tema que está abierto al debate de manera permanente y es el de las ganancias. Esta vez vamos a ver qué pasa con los autónomos, quienes abonan desde ingresos más bajos a montos más altos que los asalariados.
“El autónomo es un impuesto que se paga todos los 20 y lo que tiene es que paga ganancias anuales, debe abonar obra social y el IVA. Además, hay muy pocas deducciones“, aseguró Juan Pablo Chiesa, abogado laboralista de Aptitud Renovadora.
La exigencia por parte de autónomos está relacionada a una revisión en los pisos y en las proporciones a pagar, además de una unificación porcentual. “No es muy difícil hacer una ley que tenga un artículo que diga ‘Deróguese el inciso 4 del artículo 79 de la Ley de Ganancias’, el efecto es que los empleados en relación de dependencia y jubilados no paguen más ganancias”, completó Chiesa.
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Un autónomo que esté año tenga un ingreso de 4,5 millones de pesos, descontados los gastos posibles, tendrá una carga fiscal de $1.112.487. Ahora bien, si un asalariado tuviera ingresos similares debería abonar $864.973. Sí, la brecha es amplia.
