En medio de la escalada de violencia que sufre la ciudad de Rosario, el último tiempo, las escuelas se volvieron el blanco de las balaceras de las bandas narcos. Es que en los últimos días, las escuelas rosarinas se vieron obligadas a suspender sus actividades debido a amenazas recibidas durante la madrugada del miércoles pasado.
Uno de los establecimientos fue baleado, hecho que se acompañó con un mensaje dirigido a un sindicalista, mientras que el otro instituto educativo recibió un cartel que advertía sobre una balacera. Ambos hechos ocurrieron en un contexto de violencia hacia las instituciones educativas: en lo que va del año ya son 38 las escuelas que en algún momento suspendieron el dictado de clases.
El miércoles pasado, los porteros de la escuela primaria Nº 1337 Carlos Sylvestre Begnis, ubicada en Nahuel Huapi al 4500, se encontraron con que el lugar había sido blanco de un ataque a balazos. Hallaron al menos ocho vainas servidas, algunos impactos en el portón y una nota amenazante. Acerca de la nota amenazante hallada en esta escuela se supo que está dirigida a un sindicalista del gremio de recolectores de residuos.
Mientras tanto, en la escuela secundaria Nº 518 Carlos Fuentealba, de Rouillón al 4400, fue hallada una nota amenazante, aunque en este caso no se encontraron rastros de un ataque armado. El contenido del mensaje hacía referencia a que el lugar iba a ser baleado. El texto fue hallado cuando los alumnos ya habían ingresado a la institución, por lo que se decidió suspender las clases.
En ese marco, no es la primera vez que la escuela es blanco de una balacera, y esto afecta a diario a maestros, alumnos y padres.