Las redes sociales de Facebook, Twitter e Instagram bloquearon por 24 horas las cuentas del presidente estadounidense Donald Trump. No las cuentas institucionales sino las que usaba él, en donde había seguido cuestionando los resultados de la elección para seguir arengando a los fundamentalistas de qua non, quienes entraron al capitolio, de que se quedaran ahí a defender los resultados de una elección que ya todos daban por perdida.
RePerfilAr se comunicó con Luciano Elizalde, director de la Maestría en Gestión en las Comunicaciones de la Universidad Austral, para analizar si las empresas hicieron bien en tomar esa decisión y además qué rol cumplen exactamente en los medios hoy en día. “Es algo parecido a lo que sucedió a principios de diciembre cuando los canales también dejaron de transmitir el discurso de Trump. La cuestión es si las empresas de internet están en el sistema periodístico o no y por otro lado hacia dónde nos lleva este tipo de comportamiento”, opinó Elizalde y profundizó: “Las compañías se están metiendo en un proceso difícil de encontrar la salida porque quiénes son las personas que deciden qué es mentira y qué es verdad, ese es el problema de fondo”.
Tras la violencia, Trump acepta la transición: "Servir como presidente fue el honor de mi vida"
Consultado precisamente sobre el rol de Facebook, que en su momento había ayudado, de alguna manera, al manejo de desinformación para que Donald Trump gane las elecciones en 2017, el director de la Maestría manifestó: “Si las empresas de redes sociales son parte del sistema periodístico tienen que dejar que el presidente hable por las redes y luego viene un proceso de análisis para sacar la conclusión de lo que sí se ha dicho es verdadero o es falso”, y agregó: “No creo que la prohibición sea la manera de solucionar el problema”.
Con respecto al rol de los medios estadounidenses que piden que se haga un juicio político a Trump, Elizalde dijo: “Los medios están tomando, al igual que las empresas de redes sociales, una posición política e ideológica explícita. Es una decisión también editorial y empresarial. Que Donald Trump vaya a juicio político es una cuestión que tiene que ser decidida por el congreso de los Estados Unidos y me parece que un medio puede opinar que está bien que el presidente sea puesto en juicio político o no. La discusión es lo que tiene que seguir adelante en el espacio público”.
