Rusia derribó drones ucranianos en el sur y cerca de Moscú. "Nos gustaría que esto termine pronto", dicen los habitantes de Rostov del Don tras la explosión contra un edificio y varios vehículos. Por su parte, los rusos golpearon nuevamente el Puerto de Izmail, principal vía para las exportaciones de cereales que salen por el Danubio.
En las últimas horas, 750 soldados ucranianos murieron o resultaron heridos. En medio de acusaciones entre Rusia y Ucrania, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, elogió la fortaleza de Ucrania.
En medio de la tragedia hubo un momento para la cajita feliz. El canciller ucraniano Dmytro Kuleba, y Blinken, compartieron comida rápida luego del anunció de más de mil millones de dólares en nueva ayuda estadounidense a Ucrania.
Pero el Kremlin salió a criticar la promesa norteamericana de suministrar a Ucrania municiones de uranio empobrecido. Tiene riesgos tóxicos y por estas horas la ONU expresó su preocupación.
"El uranio empobrecido aceleró los cánceres y la responsabilidad recae en la Casa Blanca", denunció el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov.
