En las últimas horas, la directora del hospital de Cipolletti confirmó la muerte cerebral de María Agustina Fernández, la joven estudiante de Medicina que fue brutalmente atacada por un grupo de delincuentes en ocasión de robo. Estos últimos ingresaron a la casa de su amigo, donde la joven se encontraba sola. Agustina estaba internada con asistencia respiratoria, y las autoridades continúan buscando a los autores del hecho.
De acuerdo con el último parte médico, la joven no presentaba mejoras, continuaba con actividad cardíaca y respiraba mediante asistencia. Tal como indicaron fuentes hospitalarias a TN, para el día de hoy, el personal médico tenía prevista la realización de una serie de estudios, pero Agustina no respondió a los estímulos.
Ante la confirmación de la triste noticia, un grupo de vecinos llegó al hospital de Cipolletti a las 22. Uno de ellos publicó en Facebook: “Haremos un acompañamiento simbólico a los padres de Agustina con una vela encendida en el exterior del nosocomio. Demos un poco de amor a su familia y pidamos por ella. Es un encuentro pacífico desde el corazón, ante tanta violencia”.
Cómo fue el ataque
Agustina fue atacada durante la noche del sábado, cuando visitó a un amigo que vivía muy cerca de su casa. En un momento de la noche, el joven salió para comprar unas empanadas y fue en ese instante en el que los delincuentes ingresaron a la vivienda y atacaron a la joven estudiante.
El amigo de Agustina volvió a su casa alrededor de las 22 y la encontró desvanecida en el suelo, con un corte profundo en la cabeza y varias heridas en las manos. De acuerdo a lo que indicaron fuentes policiales presentes en el lugar del hecho, faltaban dos celulares y una suma estimada de 1.000 dólares. Además, todo se encontraba desordenado.
Silvana, la madre de Agustina dijo en diálogo con LM Cipolletti: "Estaba en el lugar y en el momento menos indicado. Ella no debía estar ahí y recibió la peor parte”. Además, agregó: "Se llevaron dos celulares y dinero, a ella no le robaron nada. Por tan poco...".
Durante el transcurso del día domingo, las autoridades trabajaron en el lugar del hecho, con el objetivo de encontrar algún rastro que los acercara a la identidad de los atacantes. Pese a eso, hasta el momento, la causa no cuenta con ningún detenido.
Agustina presentaba lesiones en varias partes de su cuerpo y un traumatismo encefalocraneano, que era la herida más grave. Además, tenía la mano izquierda quebrada. "Los peores golpes que recibió fueron en la cabeza; ella intentó defenderse", relató Silvana. También agregó: "No entiendo por qué tanta golpiza, le pegaron a matar".
En el momento de su ingreso a la institución médica, Claudia Muñoz, directora del Hospital Pedro Moguillansky dijo: "Tiene un pronóstico muy, muy malo. El traumatismo que tiene en la cabeza es gravísimo".
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La vida de Agustina en Cipolletti
La joven tenía 19 años y era oriunda de Santa Rosa, La Pampa. Llegó a Cipolletti en marzo de este año, para iniciar sus estudios universitarios, gracias al gran esfuerzo económico realizado por sus padres.
Agustina se mudó a la ciudad rionegrina el primero de marzo, para comenzar el año lectivo en la Facultad de Ciencias Médicas de la UNCo. Al respecto, su madre dijo: “Se estaba acomodando, le estaba yendo bien y estaba haciendo amigos. Vino acá con toda la esperanza, y nosotros no la vamos a perder a ella”.
MAR / fl