SOCIEDAD
una tarea de riesgo en una zona conflictiva

Bomberos de la Villa 31: el cuartel de voluntarios y vecinos que salen en moto a combatir el fuego

Unos 70 hombres y mujeres integran este cuartel del Barrio Padre Mugica que comenzó a formarse en 2019, cuando se creó el cuerpo de brigadistas del barrio. Cuatro años después, ya cuenta con un cuartel general propio. “Estamos preparados para contener el problema hasta la llegada de los cuerpos de bomberos de la Ciudad de Buenos Aires”, explicó a este diario el comandante Horacio Viale, a cargo del destacamento. En los dos últimos tiempos no se registraron muertes por incendio. Antes de la creación había, cada año, al menos, entre 22 y 14 fallecidos por focos ígneos.

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Equipo. El destacamento funciona en una torre de dos contenedores y los voluntarios asisten a unos 140 mil habitantes que viven actualmente en el Barrio 31. | Sergio Piemonte

Solidarios, abnegados, sacrificados y sin pedir nada a cambio, son tan solo algunas de las características que definen a los bomberos voluntarios en líneas generales, sobre todo a la hora de salvar una vida o jugársela por los demás. Pero todas estas características toman mayor relevancia cuando se trata del primer cuerpo de Bomberos Voluntarios del Barrio Carlos Mugica (ex-Villa 31) de Retiro, ya que deben desarrollar sus tareas de salvataje en un territorio que, si bien para ellos no presenta dificultades a la hora de llegar a una emergencia, es adverso para los equipos de bomberos profesionales o para las ambulancias del SAME.

Al mando del cuerpo de voluntarios se encuentra el comandante Horacio Viale, quien junto con 70 bomberos voluntarios integran este equipo de socorristas que comenzó formase en 2019, cuando se creó el cuerpo de brigadistas del barrio. Cuatro años más tarde, ese grupo de brigadistas del barrio ya cuenta con un destacamento o cuartel general propio. 

“Somos una institución de primera respuesta ante un siniestro en el barrio. Estamos preparados para contener la emergencia hasta la llegada de los Bomberos de la Ciudad de Buenos Aires”, explicó Viale, en su charla con este diario, un par de días antes del Día de los Bomberos Voluntarios que se celebró ayer (ver aparte). 

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“Los bomberos cumplen funciones como tales en otros trabajos y hacen guardias acá, mientras que otros voluntarios son vecinos del barrio que ingresaron a la brigada como cadetes y hoy, ya mayores de edad, trabajan a la par de los más grandes”, explicó el oficial a cargo. En este sentido, PERFIL pudo constatar de primera mano el accionar de los Bomberos del Barrio 31, ya que se desató un incendio en una casa del barrio Comunicaciones (ver aparte).  

En este sentido, el líder del cuerpo de socorristas contó que los bomberos llegan a sus puestos desde zonas tan disímiles como alejadas del barrio de Retiro, como Francisco Solano, Quilmes o José C. Paz, por citar solo algunas de ellas. 

Según explicó Viale, las guardias que cumplen los voluntarios tienen tres horarios: de 6 a 14; de 14 a 22 y de 22 a 6, con al menos cinco bomberos de manera permanente. También reciben capacitación permanente, con las últimas novedades al respecto. 

“Más allá de estas circunstancias, lo importante es que la función que estamos cumpliendo da resultados. En los últimos cuatro años hicimos un trabajo de concientización muy fuerte en el barrio. Entre 2022 y 2023, por ejemplo, no se registraron muertes por focos ígneos. Bajamos de 22 muertes a 14 en 2019, y de 14 a dos en 2021. El barrio está mucho mejor en tema siniestros”, agregó el comandante, sin ocultar su orgullo por la labor cumplida. 

Al respecto, Viale señaló que uno de los mayores problemas con los que cuenta el barrio es la particular infraestructura edilicia de las viviendas en general, la cual muchas veces puede provocar siniestros. “En estos casos, los cortocircuitos eléctricos o braseros mal apagados o sin ventilación son los grandes generadores de incendios, más allá de los siniestros viales que también ocurren”, aseguró Viale. 

Otro punto que destacó el comandante respecto de la seguridad del lugar tiene que ver con la urbanización del barrio. “Se instalaron bocas de incendio cada 200 metros para que se puedan conectar las mangueras, con lo cual se facilita el trabajo, tanto para nosotros como para los otros cuerpos de bomberos. Antes el agua no llegaba a todo el barrio”. 

Respecto de los destacamentos, uno se encuentra frente al nuevo local de comidas rápidas que está en la entrada de la exvilla, mientras que el “cuartel central” está ubicado sobre la avenida Carlos Perette, pocos metros antes del Ministerio de Educación porteño. En este caso, se trata de dos contenedores apilados, en el que uno de ellos sirve de guardia oficial y depósito de los equipos que utilizan. 

Mientras que el otro es el lugar de descanso de los hombres y mujeres que prestan este vital servicio a los casi 140 mil habitantes que viven en las 32 hectáreas que conforman el barrio popular. 

En este sentido, Viale contó que los contenedores fueron cedidos por la Unidad de Proyectos Especiales del Barrio Padre Carlos Mugica, que dirige Tomás Galmarini. “El trabajo que hacen los bomberos en el barrio es admirable. Es un ejemplo de lo importante que es que el ]Estado articule, acompañe y dé oportunidades a la comunidad”, señaló el funcionario porteño, en relación con las tareas que desempeña el cuerpo de Voluntarios del Barrio 31.

 

Más de 250 mil emergencias en el año

El Servicio Nacional de Bomberos Voluntarios (SNBV), que integran más de 58 mil personas en todo el país, reveló que más de 250 mil servicios de emergencia fueron realizados durante el último año.

El SNBV está integrado por el Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios, la Fundación Bomberos de Argentina, la Academia Nacional de Bomberos, y más de 1.100 asociaciones, entre otras. Por otra parte, ayer el Gobierno porteño homenajeó a los Bomberos de la Ciudad caídos en cumplimiento de su deber en un acto celebrado en el memorial de Palermo. Se recordó al comandante general Ariel Vázquez y al comisario mayor Maximiliano Firma Paz, que murieron  el 2 de junio de 2020 en el incendio de la perfumería Pigmento.
 


Un incendio en medio de la entrevista con PERFIL: “Vamos, todos a alistarse” 

La entrevista transcurría normalmente entre los integrantes del cuerpo de bomberos de Retiro y este cronista, cuando el celular de la guardia sonó y todos quedaron en silencio. Mientras el comandante Horacio Viale respondía con un “bomberos voluntarios, buenos días” y hacía unas rápidas anotaciones en un papel, los hombres y las mujeres que estaban de guardia entendieron enseguida que estaban frente a una emergencia. Y que no había tiempo que perder. 

Sin mediar más palabras que la orden impartida por Viale de “vamos, a alistarse”, en segundos los voluntarios saltaron de sus sillas, cambiaron sus ropas de fajina por los trajes, se colocaron los cascos reglamentarios y prepararon los elementos para combatir el fuego (en este caso, una columna para los hidrantes de las veredas y una línea de manguera de 25 metros). Poco después salieron corriendo del pequeño contenedor que cumple la función de cuartel general a combatir el siniestro.

Mientras tanto, el comandante recibía información sobre el incendio y coordinaba los trabajos de su equipo vía handy.

Las tazas humeantes y la ronda de mate recién iniciada quedaron para más tarde. “Esto es así siempre. Hay días en que no pasa nada, y otros, como ahora, que tenemos que dejar todo lo que estamos haciendo y salir para la emergencia. Primero está el deber”, aseguró Viale, mientras recomponía el diálogo con PERFIL, sin dejar de estar atento al handy o al celular de la guardia, claro está.  

Una hora después, y con el foco ígneo controlado, los voluntarios fueron retornando al destacamento.