Mientras el sabado anterior se celebró una nueva edición de la Marcha Mundial de la Marihuana, un informe que analiza y compara los precios del cannabis en todo el mundo, da cuenta de los alcances que podría tener su legalización en las economías de los distintos países.
En Buenos Aires, por ejemplo, donde la marihuana está parcialmente legalizada –el año pasado se sancionó la ley que permite su uso medicinal–, si a la venta del cannabis se le aplicaran las mismas regulaciones que a la industria tabacalera, que ronda el 70%, se podrían recaudar hasta 25 millones de dólares anuales.
Así lo establece el Indice de Precios del Cannabis, elaborado por Seedo, una startup israelí vinculada a la industria del cannabis, que elaboraron en base a datos de 120 ciudades del mundo, tanto en aquéllas donde su consumo es legal (para uso recreativo o medicinal) o está prohibido. Allí comparan desde cuánto se vende el gramo, cuánto se consume al año, hasta cuánta ganancia dejaría si se le aplicara impuestos, para dar cuenta cuáles podrían ser los beneficios económicos para los Estados su legalización. “Al eliminar el elemento criminal de la marihuana, los gobiernos podrán regular la producción de manera más segura, y como hemos demostrado en este estudio, generar enormes ingresos fiscales”, comentaba uno de los autores del informe, Uri Zeev.
En ese contexto, del ranking total, para el que utilizaron datos de Naciones Unidas; Buenos Aires está en el puesto 89, por encima de ciudades latinoamericanas como Río de Janeiro, Montevideo, Asunción, San Pablo, Lima y Quito.
Considerando un precio promedio de 7,13 dólares el gramo, y un consumo anual de cinco toneladas; establecen que si su comercialización fuera legal y tuviera las mismas tasas impositivas que tienen las principales tabacaleras, se podrían recaudar US$ 25,32 millones al año. Nueva York es la ciudad que más recaudaría: cerca de US$ 300 millones de dólares al año.
Otros datos del informe dan cuenta que Madrid es la ciudad con más growshops; Nueva York es la que tiene el consumo más alto, y Tokio donde el gramo se vende más caro, a 32,66 dólares. Quito, en cambio, es donde se vende más barato, a 1,34 dólares. Y. si se consideran solo las ciudades donde el cannabis es legal, Montevideo es donde se consigue al precio más bajo, a 4,15 dólares el gramo.
Siguiendo la línea del informe, el enfoque económico fue lo que impulsó a varios gobernadores norteamericanos, incluso republicanos, para avanzar en su regulación, tal como explica Sebastián Basalo, director de la revista THC. “En ocho estados el acceso a la marihuana se reguló para todo fin, mientras que en otros 25 para fines medicinales. Esto no provino necesariamente de una reivindicación al derecho de acceder a una marihuana de calidad, sino a cuestiones económicas”, sostiene. Incluso en varios hicieron referendos para que la población vote, luego de que los gobernadores explicaran cómo su regulación se vería reflejada en una baja de impuestos. “Además de reducirle los impuestos a las personas y aumentar la recaudación del Estado destinada a programas de prevención y asistencia sobre uso de diversas sustancias; lo que permitió su legalización fue generar un mercado regulado donde solo las personas mayores de edad pueden comprar en locales especializados. De esa manera, desaparece el mercado negro y el consumo en los menores de edad. Además de la generación de puestos de trabajo”, agrega Basalo.
En el mundo existen ejemplos de grandes corporaciones en la industria del cannabis, sobre todo para uso medicinal, como el caso de Cannabis giant Canopy Growth Corp. en Canadá. En el país, el consumo de marihuana está prohibido, y se penaliza su tenencia (pese a que en 2009 un fallo de la Corte Suprema declaró inconstitucional, para un caso concreto). Sí se permite su uso medicinal, acorde a la ley 27.350, que regula el estudio médico y científico de su uso. Sancionada hace un año, sin embargo, familiares de pacientes todavía reclaman por sus alcances, y porque se permita el autocultivo.
Una multitud marchó al Congreso
Por Santiago Carrillo
Unas 100 mil personas marcharon ayer en reclamo de la legalización de la marihuana para su uso medicinal y recreativo, de Plaza de Mayo al Congreso, en la 11º Marcha Mundial de la Marihuana. También en Córdoba, Salta y Bariloche, al igual que en las principales capitales del mundo. Entre las consignas de la marcha estuvieron la liberación de los presos por cultivo, y un mayor presupuesto para la investigación del cannabis medicinal, reglamentado por la ley 27.350.
“Es necesario legalizar la marihuana para luchar contra el narcotráfico, porque se le quitan los clientes”, dice Nicolás Milione, del Frente de Organizaciones Cannábicas de la Argentina. “Si las personas cultivan su planta acceden a algo de calidad y regulado”, agrega en relación a los pagos en dólares a la Anmat para importar el aceite de cannabis medicinal.
En ese contexto, reclaman por una modificación a la ley que establece penas de prisión para los que posean marihuana. Según un informe del abogado Alejandro Corda, “el 70% del trabajo de las fuerzas de Seguridad corresponde a causas por infracción a la ley de estupefacientes”.