Ya no quedan detenidos por el choque de trenes que el domingo pasado dejó cuarenta heridos en Temperley. En la tarde de ayer dejaron libre al guarda Adrián Maure, a quien habían detenido el jueves a la noche; ese mismo día liberaron al maquinista, Diego Sánchez, y su ayudante, Nicolás Navarro, acusados de haber intercambiado lugares dentro de la cabina de la formación 2777 de la línea Roca, que embistió una locomotora que realizaba maniobras a 200 metros de la estación de Temperley. Maure declaró ayer que “ejecutó las acciones que le competen” de acuerdo con su cargo y que lo hizo “de manera correcta”. Sin embargo, según adelantó a PERFIL la abogada de La Fraternidad, Valeria Corbacho, esta semana pedirán más pericias y ordenarán un careo entre Maure y una cuarta persona, cuyo nombre no trascendió, encargada de la señalización en el momento del accidente.
Defensa. En los videos del interior de la cabina se ve que Sánchez y Navarro intercambiaron posiciones, algo que está prohibido en el reglamento técnico que regula la actividad de los trabajadores ferroviarios. Las imágenes muestran que Navarro accionó el freno momentos antes de chocar. Tras el impacto, ambos volvieron a sus posiciones.
Sin embargo, según Corbacho “se está haciendo un mundo de un accidente que no fue una cuestión de impericia en el manejo sino de infracción reglamentaria. Acá es una cuestión de luces y señalización”, dijo, y agregó que lo que hace falta determinar es “cuándo se prendió la luz roja, y si antes estaba inmediatamente verde”. Justificó el cambio de posiciones como una cuestión “de práctica habitual”.
Perfil de los acusados
El maquinista Diego Sánchez tiene 28 años, y su ayudante, Nicolás Navarro, sólo 19. Egresados de la escuela de maquinistas que tiene el sindicato –se capacitan allí cuatro meses–, cobran $ 12 mil mensuales mientras hacen sus ochenta horas de práctica en las formaciones.
Ambos provienen de familias de ferroviarios. Corbacho dijo que Sánchez y Navarro “están muy angustiados. Es la primera vez que sufren algo así, sobre todo el trauma de que les hayan allanado los domicilios”.