La parroquia Virgen de los Milagros de Caacupé realizó una misa este viernes 19 de noviembre a las 17 en Iriarte y Luna, para reclamar por Lucas González, el joven que fue asesinado por la Policía. El pedido es para que se haga justicia y que no haya más víctimas del gatillo fácil.
"Esto no es un caso aislado", señaló Padre Lorenzo “Toto” De Vedia en Radio Gráfica, al subrayar que están "indignados". "Las únicas armas que tenían estos pibes eran botines de fútbol, medias y pantalones”, señaló.
Además, comentó que “el sentido común te hace pensar que la fuerza de seguridad debe utilizar, como mucho, una herramienta igual a la que tiene el otro".
Un acompañante de Lucas González dio detalles del crimen de Barracas: "No parecían policías"
El titular del Juzgado Nacional de Menores 4, Alejandro Rodolfo Cilleruelo, que investiga los hechos afirmó que "los únicos y verdaderos imputados" resultaron ser los policías. Lo hizo al desvincular "definitivamente" del caso a los tres adolescentes que acompañaban a la víctima.
"La policía en una democracia no puede actuar bajo ningún concepto de modo subrepticio y sin debida identificación, menos cuando están ordenando la detención de un vehículo del cual como se comprobó no partió agresión de ninguna naturaleza", sostuvo Cilleruelo.
Esto está vinculado con lo que dijo Niven Huanca, uno de los jóvenes que viajaba en el auto junto a Lucas González. "Pensé que me robaban todo porque parecían chorros, bajaron con el arma en mano como para robar directamente. No parecían policías (...) Lo tenía a Lucas adelante y veo que le sale una bala de un costado. Ahí Joaquín, que estaba al lado mío, dice: ‘Está muerto, lo mataron'", relató.
AR CP