Este lunes en Monte Grande, dos chicos de 11 y 15 años vivieron una situación de horror al descubrir a su mamá y al novio muertos dentro de su casa. La mujer, Analía Celeste Oliva, de 45 años, fue encontrada apuñalada, mientras que el hombre, Federico Espinoza, de 43, estaba ahorcado. El suceso, según fuentes policiales, está siendo investigado como "femicidio seguido de suicidio".
El descubrimiento se produjo en horas de la mañana en una propiedad ubicada en la calle Rauch al 700, en Monte Grande, en el partido de Esteban Echeverría.
Según los menores, la noche anterior hubo una discusión entre la pareja. Fueron los propios hijos de Oliva quienes, al despertarse, encontraron primero a Espinoza ahorcado en el descanso de la escalera externa que conecta la planta baja con la planta alta.
Después descubrieron en una habitación de la planta alta al cuerpo de su madre con múltiples heridas, junto a un cuchillo ensangrentado. Inmediatamente, los chicos buscaron ayuda en la casa de un vecino, desde donde llamaron a la policía y a la ambulancia.
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Según la versión de los menores proporcionada a las autoridades, su madre y Espinoza mantenían una relación, aunque el hombre no vivía con ellos.
"Los chicos contaron que anoche, antes de irse a dormir, escucharon cómo su mamá y el novio discutían. Todo indica que se trató de un femicidio seguido de suicidio", expresó un jefe policial involucrado en la investigación.
El caso quedó bajo la supervisión de la fiscal Vanesa González, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) especializada en Violencia de Género de Esteban Echeverría, perteneciente al Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
Según registros de Télam, a partir de fuentes policiales y judiciales, este es el femicidio número 51 en lo que va del año en toda Argentina. Además, es el sexto caso en el que el presunto femicida se suicida tras cometer el crimen, según estas estadísticas.
LT
