La pandemia generó estragos económicos y sociales. Dentro de este último segmento, la educación fue una de las áreas más afectadas. Escuelas cerradas, baja presencialidad en clases virtuales o sin conectividad, fueron algunas de las circunstancias que llevaron a que los alumnos abandonaran sus cursos, en especial los de nivel medio o secundaria.
No resultó extraño que solo 13 de cada 100 estudiantes que comenzaron primer grado en 2011 finalizaron la escuela secundaria en el tiempo teórico esperado en 2022, y con buenos aprendizajes en Lengua y Matemática.
La cifra, basada en datos posteriores a la pandemia, supone un retroceso respecto a los resultados de las camadas previas como las de 2005-2016 y 2009-2020.
Los datos surgen del informe “Índice de Resultados Escolares: ¿Cuántos estudiantes llegan al final de la secundaria en tiempo y forma?”, del Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Irene Kit (Asociación Civil Educación para Todos), Martín Nistal y Leyre Sáenz Guillén (Observatorio de Argentinos por la Educación).
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El documento analiza la trayectoria escolar de las camadas de estudiantes que comenzó primer grado en 2011 y llegó al último año de la secundaria en 2022, utilizando los datos de las pruebas Aprender 2022 de secundaria.
El informe da seguimiento al Índice de Resultados Escolares, que en un estudio previo para los grupos de alumnos y estudiantes que cursaron entre 2009-2020 arrojó que solo 16 de cada 100 alumnos llegaban en tiempo y forma al final de la secundaria.
Entre los estudiantes que llegan a tiempo al último año de la secundaria, solo el 21,5% logró alcanzar los aprendizajes esperados de Lengua y Matemática, con niveles satisfactorios en Aprender 2022. Esto representa una caída del 12,6% en comparación con los resultados de 2019.
Un 33,5% de los estudiantes que rindió la prueba en el último año no alcanzó los niveles mínimos ni en Lengua ni en Matemática: la cifra aumentó con respecto al 26,5% registrado en 2019. La caída se explica principalmente por el retroceso en los puntajes de Matemática.
Los mejores índices
Las dos jurisdicciones con mejores índices en 2022 son CABA (29%) y Río Negro (18%). Hay varias jurisdicciones donde menos del 10% de los estudiantes llegan al último año de la secundaria con la edad y los conocimientos esperados; la cifra desciende al 5% en Corrientes, Formosa y Santiago del Estero.
A nivel nacional, de cada 100 estudiantes que comenzaron su escolaridad en 2011, 61 llegaron al último año de la secundaria en el tiempo esperado (12 años después).
Esta cifra es mayor que las camadas anteriores y contrasta con un 46% para los alumnos que cursaron entre 2005-2016 y un 53% para 2009-2020, lo que muestra un aumento gradual en el porcentaje de estudiantes que llegan al último año a tiempo.
En 20 de las 24 jurisdicciones viene aumentando la proporción de estudiantes que llegan al último año de la secundaria en el tiempo esperado. Al comparar la cohorte de 2011 con la de 2009, todas las jurisdicciones registran un aumento en la proporción de estudiantes que llegan al último año de sus estudios en el tiempo teórico, con excepción de Córdoba y Corrientes.
Tierra del Fuego (83%), Río Negro (76%) y Chubut (72%) tienen la mayor proporción de alumnos que llegan al último año de la educación obligatoria en el tiempo esperado. En el otro extremo se ubican las jurisdicciones de Corrientes (38%), Misiones (45%) y Santiago del Estero (45%).
En este sentido, Irene Kit afirmó que “tenemos una buena noticia ante nosotros. Se amplía la cantidad de estudiantes que llegan hasta el último año de secundaria. Y un dato para preocuparnos: son cada vez menos los estudiantes que dan evidencia de saberes matemáticos consolidados. Tenemos un logro para conservar, y un déficit para revertir: tanto lengua como matemática caen, pero es mucho peor en matemática. Las pruebas PISA 2022 tuvieron como eje especial la enseñanza y aprendizaje de matemática”.
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El informe señala que existe una marcada relación entre los resultados educativos por jurisdicción y el nivel socioeconómico (NSE) de los estudiantes. Aunque la correlación no es perfecta, se observa que la jurisdicción con el NSE promedio más bajo (Santiago del Estero) también registra el Índice de Resultados Escolares más bajo, mientras que la jurisdicción con el NSE promedio más alto (CABA) presenta el Índice de Resultados Escolares más elevado.
Marcelo Sebastián Velazquez, de la Fundación Más Voces, consideró que “la situación de pobreza en la que el país sigue estancado atraviesa todos los indicadores y problemas. El sistema educativo no está exento de ello pese a que es la herramienta más importante que tenemos para poder salir de esta situación".
Por su parte, Magdalena Benvenuto, directora ejecutiva de la ONG Educar y Crecer, afirmó que “los datos revelados por este informe se traducen en una realidad alarmante: a los 18 años, solo 1 de cada 10 jóvenes en Argentina puede enfrentar el mundo de los estudios superiores. Esta tragedia no puede explicarse como un fracaso de la escuela secundaria o por factores coyunturales como la pobreza, porque la tendencia negativa del desempeño de los estudiantes del secundario en Argentina ya arrastra 20 años. Es entonces necesario analizar al sistema educativo de raíz”, concluyó.
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