El frío volvió a ser noticia. Ráfagas de 40 y 70 kilómetros por hora sorprendieron a porteños y bonaerenses el jueves por la noche y se esperan para este viernes lluvias y chaparrones, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Cerca de las 17:30 de ayer, el organismo había emitido una alerta por los intensos vientos (que abarcó, además, el sur de Entre Ríos y Santa Fe) como consecuencia de "la formación y posterior profundización de un sistema de baja presión sobre el sudeste de Uruguay y el ingreso de un sistema de alta presión por el centro del país".
Desde el Gobierno de la ciudad, se advirtió desde temprano no colocar macetas ni sillas de plásticos en los balcones y extremar los cuidados en obras de construcción con elementos que pudieran causas accidentes como chapas, ladrillos o tirantes.
Por el vendaval, se desprendió un ventanal a la altura del piso 20 en la intersección de Callao y Arenales mientras que un árbol cayó en Colón y Venezuela, en la ciudad de Buenos Aires.
El ministro de Espacio Público, Diego Santilli, aseguró al diario Clarín que "como sabíamos que venía esta sudestada, desde el martes reforzamos el barrido de hojas y la desobstrucción de sumideros. Además, bajamos el nivel de agua del lago Regatas, de Palermo, que es regulador del agua de lluvia".
Para lo que resta del día se espera una mínima de 5° y una máxima de 10°. Para este sábado, en tanto, el SMN pronostica más frío con un 1° grado mínima de 1° y 10° de máxima. El domingo estará despejado con vientos leves de direcciones variables y la térmica rondará entre los 2 y 12 grados.