La polémica por la seguridad en la Ciudad de Buenos Aires reabre un viejo capítulo. El Gobierno porteño anunció que van a insistir en la Justicia para poder usar las pistolas Taser que tienen.
Se trata de 60 pistolas que el Gobierno porteño licitó en 2019. Sin embargo, la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac), el organismo que debe autorizar la compra, no autorizó la llegada de estas armas.
El ministro de Seguridad y Justicia de la Ciudad Buenos Aires, Marcelo D'Alessandro, afirmó hoy que "hace dos años" vienen peleando para conseguir la autorización. "Si no tenemos respuesta esta semana vamos a ir a la vía judicial", adelantó el Ministro al canal América TV.
"Es una cuestión ideológica. No están de acuerdo con la utilización de este tipo de armas", señaló el funcionario para explicar el rechazo a la implementación de las Taser.
La polémica se generó durante el gobierno de Mauricio Macri, cuando Patricia Bullrich quiso traer esas pistolas al país y desde la Justicia se le puso un freno.
El argumento judicial fue que organismos como las Naciones Unidas las reconocían como método de tortura. Estas armas provocan una descarga eléctrica de 400 volts que inmoviliza durante cinco segundos a quien recibe el disparo.
"Si no tenemos respuesta esta semana vamos a ir a la vía judicial"
En cambio, para el Ministerio de Seguridad nacional, el uso de las pistolas Taser por parte de las fuerzas de seguridad ante situaciones que involucran a personas bajo efectos de sustancias o víctimas de padecimientos mentales fue desaconsejado por el propio fabricante.
En ese sentido, el funcionario sostuvo que esta tecnología sirve para "abordar" el delito "como lo hace el primer mundo", algo que "el Gobierno" no permite. "No pretendemos minar la ciudad con estas armas. Lo que vamos a hacer es crear unos móviles Taser en cada comuna", explicó D'Alessandro.
AR / MCP