Desde tiempos antiguos, las aguas termales fueron consideradas de origen divino por los efectos beneficiosos que causaban en quienes las bebían o se sumergían en ellas. Sus aguas tienen diferentes efectos en el cuerpo humano, que se dividen en tres: biológicos, físicos y químicos, aunque, en realidad, todos actúan al mismo tiempo, ayudando en la prevención o tratamiento de enfermedades respiratorias, de la piel, reumáticas, problemas de circulación o gastrointestinales.
En nuestros días, el relax y la prevención en la salud constituyen los motivos más importantes en la búsqueda de recursos termales, pero también la diversión. Por eso, los numerosos complejos de la Provincia de Entre Ríos, aparte de piscinas donde se disfruta recreativamente de las propiedades del agua termal, ofrecen modernos espacios de relax y tratamientos de belleza. Estos establecimientos se ubican estratégicamente en varias ciudades de la provincia litoraleña y cada uno ofrece un estilo diferente en servicios exclusivos y adecuados para cada visitante.
A continuación, una guía con datos útiles para conocer los diferentes establecimientos termales que ofrece la provincia:
