El Gobierno anticipó que "se abren las fronteras para recibir turistas de los países limítrofes" por vía aérea y marítima a partir de la próxima semana, sin hacer cuarentena pero con testeo previo de coronavirus. La medida representará un "ingreso importante" de divisas en plena crisis cambiaria.
La medida fue confirmada este sábado 24 de octubre por el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, quien señaló que se trata de una "una decisión tomada" y que representa "una nueva etapa" sin descuidar la lucha contra la pandemia, aunque los ingresantes no deberán hacer cuarentena. El anuncio se conoce luego de que este viernes el presidente Alberto Fernández anunciara una nueva extensión del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio.
"Se trata de una nueva etapa de la pandemia que nos permite dar vuelta la página", dijo Lammens en diálogo con Radio Mitre, y agregó que la medida será publicada este domingo en el Boletín Oficial. El funcionario destacó la necesidad de no descuidar todo lo que se logró desde el origen de la pandemia: “Estamos trabajando en los protocolos sin poner en riesgo la salud”, destacó.
El ministro aclaró que la medida contempla a quienes viajen desde "países limítrofes" (Brasil, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay) mediante "vía aérea por Ezeiza y la frontera marítima para Uruguay". "No tendríamos ningún problema. Estamos terminando de definir algunas cuestiones", remarcó, y aclaró que la intención es que puedan llegar "a partir de la semana que viene".
Lammens subrayó que el Gobierno apuntará a "turistas que vengan a la Ciudad de Buenos Aires y adelantó también que "la apertura estará en el DNU del domingo". Y agregó que "no va a haber cuarentena", sino que "les pedimos el test" negativo de COVID-19 "para tener algún grado de seguridad de que no vienen infectados". También señaló que se tomará la temperatura a quienes lleguen al país y se les solicitará una declaración jurada. "Estamos trabajando en una burbuja desde Ezeiza para que sean trasladados a la Ciudad de Buenos Aires", sostuvo.
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Sector golpeado y crisis cambiaria
Como en todo el mundo, el sector turístico fue uno de los más golpeados por la pandemia, tras casi siete meses de inactividad total. Según datos del INDEC, la llegada de turistas no residentes cayó en agosto 99,3% interanual. Además, según estimaciones del Ente de Turismo porteño, el gasto turístico equivale al 3 por ciento del Producto Bruto de la Ciudad de Buenos Aires, que además viene de transitar un año récord de visitas, con 2,9 millones de turistas internacionales en 2019.
Además del agotamiento de la cuarentena, la reapertura se impulsa por la crisis cambiaria, en plena caída de reservas del Banco Central y luego de que este viernes el dólar blue rozara la barrera de los 200 pesos. Por eso, el propio Lammens destacó que el turismo receptivo es "un ingreso importante" de divisas.
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