El caso que investiga los abusos sexuales en el Instituto para niños con hipoacusia Próvolo de Mendoza suma un nuevo capítulo. Ahora, se incorporaron a la causa decenas de cartas con contenido sexual y dibujos obscenos escritas por el cura imputado, Horacio Corbacho.
El querellante de la causa Juan Dantiac, detalló en declaraciones a la prensa que "se trata de unas cincuenta cartas" que encontraron "en la habitación del sacerdote" durante los allanamientos, "veinticinco de las cuales demuestran actividad sexual dentro del instituto”.
El abogado afirmó que las misivas "tienen dibujos obscenos y contenidos de índole sexual con mención al alcohol y comparación del instituto con un prostíbulo”.
Y completó: “La prueba es importante porque hay versos que hacen referencia permanente al sexo y lo que se vivía allí adentro, muy lejos de un instituto religioso”, lamentó el querellante y detalló que las cartas hacen referencia a las monjas en forma genérica y a Kosako monja Kumico (imputada en la causa) en forma particular, al referirse a la `japonesa´”, según consignó el medio local Mendoza Post.
Al parecer las cartas (algunas datan de más de una década) se intercambiaban con un diácono de Buenos Aires y dejan en evidencia la actividad sexual que había en el Próvolo.
El caso. En noviembre de 2016 la senadora Daniela García denunció los hechos de abuso en el Próvolo luego de que se le acercara una integrante del Movimiento de Sordos para informarle lo que allí sucedía.
En ese momento, el arzobispado de Mendoza, de quien depende la institución, emitió un comunicado donde expresaron: "Nos entristecen e indignan dichos sucesos. Manifestamos nuestra solidaridad y cercanía con las víctimas de los hechos objeto de la denuncia".
Por el hecho, se encuentra detenido el cura Horacio Corbacho, de 56 años, el monaguillo Jorge Bordón (50) y el exjardinero del lugar, Armando Gómez (46). La causa por abusos a chicos sordos e hipoacúsicos en el Próvolo tiene además 14 imputados, a tres de los cuales se les concedió la prisión domiciliaria: el cura italiano Nicolás Corradi (82); la monja japonesa Kumiko (42), y la ex representante legal Graciela Pascual. En tanto, José Luis Ojeda (41), ex empleado del Próvolo, fue sobreseído.