SOCIEDAD
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Solidaridad centennial: cuando los jóvenes usan la tecnología para ayudar

Hay emprendedores que aplican sus conocimientos para crecer a nivel laboral y colaborar con otros.

El proyecto de Gino Tubaro imprime prótesis ortopédicas en 3D y las distribuye de forma gratuita a personas con discapacidad.
El proyecto de Gino Tubaro imprime prótesis ortopédicas en 3D y las distribuye de forma gratuita a personas con discapacidad. | Atomic Lab

Animarse a sembrar un futuro en el mundo de la tecnología y la informática no es algo sencillo, menos aún destacarse en ese área. Pero hay muchos jóvenes argentinos que no se rinden y luchan por alcanzar sus sueños. Así es como de a poco fue surgiendo una camada de jóvenes que trabajan para lograr sus propósitos pero, además, aportan su granito de arena para ayudar a otros a conseguirlo. Transforman su pasión en solidaridad.

Gino Tubaro tiene 23 años y su pasión por la tecnología se remonta a su infancia. A los seis años ya desarmaba electrodomésticos de su casa sólo para averiguar qué tenían adentro. Luego creó “talleres de inventos” en el que construía aparatos con materiales reciclables. Fue allí donde su talento comenzó a destacarse. Con algunos de sus trabajos ganó premios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Massachusetts Institute of Technology (MIT), entre otras entidades. 

“Como me fue gustando lo que estaba haciendo, ya de adolescente empecé a especializarme en eso. De hecho, es lo que me sigue motivando”, reconoció en una entrevista con PERFIL. En la actualidad, es inventor y se encuentra al frente de Atomic Lab, una empresa que imprime prótesis ortopédicas en 3D y que distribuye de forma gratuita a personas con discapacidad, tanto adultos como chicos. 

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El proyecto de Gino Tubaro imprime prótesis ortopédicas en 3D y las distribuye de forma gratuita a personas con discapacidad.
El proyecto de Gino Tubaro imprime prótesis ortopédicas en 3D y las distribuye de forma gratuita a personas con discapacidad.

El joven ingeniero Gino Tubaro ganó el premio a la Inteligencia de los Argentinos

Su proyecto nació ocho años atrás y sigue en constante crecimiento. La ONG consta de 8 personas y 1.400 voluntarios repartidos en 44 países que son los embajadores. De esa forma, la iniciativa se comparte a través de Internet. 

Su emprendimiento se inició cuando él tenía apenas 16 años y con materiales reciclables creó una impresora 3D. Su idea original era vender esos aparatos pero un día encontró su nuevo rumbo ante un pedido especial. “Eso terminó siendo un fracaso, pero todo cambió cuando la mamá de Felipe nos contacta y nos pide una prótesis para su hijo. Se la diseñamos y se la mandamos a su casa y después de esa empezamos a entregar cada vez más. Ya ayudamos a más de 1200 personas”, explicó Tubaro.

La iniciativa tiene 8 años y sigue en constante crecimiento.
La iniciativa tiene 8 años y sigue en constante crecimiento.

Cada una de las manos y brazos que fabrican lleva un diseño particular. Las personas pueden elegir el color que quieren o el motivo, solo deben mandar una imagen de su muñón encima de una hoja cuadriculada. “Muchos de los chicos eligen superhéroes como Iron Man o Spiderman y con la prótesis ellos se sienten recontra superhéroes. Más que nada porque es un cambio físico porque pueden hacer un montón de cosas que antes no podían pero también es un cambio psicológico, es una forma que el chico se evite bullying o rechazo que tiene la gente cuando ve a alguien sin una mano o una pierna”, indicó el joven.

Tubaro lleva a cabo todo ese proyecto ad honorem y se mantiene con otros trabajos que le encargan de diseño y gracias a las ayudas de fundaciones y de la parte filantrófica de empresas como Ford, Telecom Alliance Seguros. “No queremos involucrar al proyecto con ningún color político”, aseveró cuando se le consultó por si reciben ayuda estatal. 

Con la prótesis los chicos se sienten recontra superhéroes, dice Gino

María Vallejos tenía 16 años cuando quedó embarazada. Cuenta que tuvo que irse de su casa y se mudó a la villa 1-11-14, donde tuvo a su hija. Al tiempo tuve otra hija allí mismo. Un día le dieron un folleto en la calle en el que se promocionaba un curso gratuito de formación en tecnología y, sin conocer del tema, comenzó a acudir. No se podía imaginar el giro que iba a dar su vida después de aquello. 

Las primeras semanas se desanimó, pero uno de sus profesores la alentó a seguir. “Que vieran mi potencial y confiaran en mí me dio fuerzas”, manifestó Vallejos a este medio.  Finalizado el curso continuó formando parte del equipo de la empresa, donde permaneció dos años en los que su crecimiento laboral fue notable. Luego trabajó en una agencia de comunicación digital y hoy, con 23 años vive en Villa Crespo y forma parte de una empresa de capacitación tecnológica líder en América Latina.

Deseo devolverle al universo o a quien sea un granito de arena, dijo María

Después de su propia experiencia, ahora quiere ayudar a otros a conseguir lo mismo. Así es como con otro socio busca impulsar una ONG que asista a jóvenes que quieran incursionar en la tecnología. “Quiero que tengan una oportunidad, y no solamente en Capital y en los asentamientos de las villas sino que todas aquellas personas que lo deseen puedan hacerlo. Deseo devolverle al universo o a quien sea un granito de arena”, explicó. 

Rompiendo mitos

El talento no solo se encuentra en las grandes ciudades como Buenos Aires. En el norte del país, una zona que se suele vincular al sector agrario y al turismo, también existe un enorme potencial de muchos jóvenes que rompen esquemas y se animan a incursionar en el mundo IT.

Alejandro Robles es un emprendedor jujeño, de 26 años. Junto a su socio diseñó eMediapp”, una aplicación que permite analizar las audiencias radiales e identificar, por medio del procesamiento de datos, el mejor camino para favorecerlas en el desarrollo mediático. Con su iniciativa este año ganó el certamen de big data de la región NOA.

Él empezó en empresas de software, como Nubimetrics, donde conoció a su actual socio, David. “Ahí es donde aprendimos lo que era el concepto del big data, analizar y procesar datos”, contó a este medio. Uno de sus clientes fue Radio Visión Jujuy, que les pidió una aplicación para poder emitir por Internet y luego si podían detectar cuántos oyentes tenían. De ese modo desarrollaron una plataforma que es ahora su fuente de trabajo.

Al vender este servicio por mail marketing podemos enviar a otros países, dijo Robles

El 80% de sus clientes se encuentran fuera de Argentina. “Al vender este servicio por mail marketing podemos enviar a otros países. Estamos en siete de la región más en España, tenemos unos 105 clientes. El argentino no le compra al argentino, nuestro cliente de afuera es mucho mayor”, precisó. Al darse cuenta de que la tecnología que desarrollaron se puede ampliar a otros medios de comunicación además de la radio le cambiaron el nombre y ya empezaron a incursionar en la televisión para El Salvador. 

Lo que buscan es ser la tercera empresa jujeña con un producto propio y exportarlo a distintos países. No obstante, ofrecen su servicio de forma gratuita a radios comunitarias y universitarias argentinas para ayudarlas a mantenerse y prosperar. 

En la iniciativa “Aprender Jugando” elaboran juegos didácticos para llevar a jardines de infantes de la zona.
En la iniciativa “Aprender Jugando” elaboran juegos didácticos para llevar a jardines de infantes de la zona. 

Mereces Banegas tiene 18 años y es de San José del partido de Metan, ubicado al sur de la provincia de Salta. En su escuela secundaria podía elegir entre dos modalidades: economía e informática. Toda su familia eligió la primera opción pero ella pensando en su futuro decidió ir a por la segunda rama. En cuarto año a través de un proyecto de la profesora Verónica Pisacic, llamado “Aprender Jugando”, empezó a involucrarse en lo que era la programación y robótica.

Con este taller, elaboran juegos didácticos para llevar a jardines de infantes de la zona y también se realizan capacitaciones de informática y robótica en otras escuelas de forma gratuita. “Fue una motivación enorme ver la reacción de chicos y grandes. Sentíamos que económicamente no teníamos mucho para dar así que les brindábamos a otros nuestros conocimientos”, afirmó la joven a PERFIL

En la asignatura “lengua” realizan juegos en los que enseñan las vocales, en “matemática” números y también impulsan a realizar ejercicio por eso diseñan actividades en las que los chicos se tengan que mover, por ejemplo, con un piano en el piso en el que tienen que ir pisando teclas. Incluso realizan circuitos sumando varias prácticas. Con “Aprender Jugando” acudieron a ferias de ciencias, donde ganaron a nivel provincial el año pasado. Luego fueron seleccionados para participar en una competencia en Bogotá (Colombia), donde ganaron el certamen. Esa victoria les dio el pase para asistir a otra competencia para el año próximo.

Banegas rompió barreras por su juventud, su especialización pero también por su origen geográfico. “La gente se sorprende que mi especialización sea tecnológica siendo del norte. No sólo en Buenos Aires tienen chicos que saben lo que es robótica, las provincias del interior también tienen mucho talento en Salta, Jujuy o Tucumán. Para mi es un orgullo que en mi pueblo tan chico hayamos llegado tan lejos”, consignó.

telecom jujuy 09062019
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Además de sus proyectos solidarios Gino Tubaro, María Vallejos, Mercedes Banegas y Alejandro Robles compartieron sus experiencias en Salta y Jujuy en el ciclo "Historias que Inspiran" en el norte argentino. El encuentro organizado por Telecom, en alianza con los gobiernos locales, buscó inspirar a más de 900 jóvenes del último año del secundario, a pensar su futuro en el mundo digital.

Tubaro destacó: “Quise mostrarle a los chicos que con poco podemos hacer mucho, que con pocos recursos se pudo ayudar tanto”. Por su parte, Vallejos remarcó: “Es una forma de que le digan chau al ‘no puedo’ como hice yo, gracias a que pude eliminar esas barreras y me di la oportunidad de creer en mí misma tengo ahora tanto. No tenés porqué limitar tus sueños independientemente de dónde venís. Me llena de emoción y me encanta, te das cuenta en su mirad que les estás dando una visión de esperanza a que uno se anime a cambiar su futuro”.

Robles sostuvo que, si bien las instituciones necesitan invertir para actualizarse a la hora preparar a las nuevas generaciones para el mundo laboral “estos ciclos sirven porque animás a los más jóvenes”. Finalmente, Banegas puntualizó: “Vi mucho asombro. Poder tener la oportunidad de contarles a los chicos mi experiencia y animarlos que se involucren la verdad que me causó una sensación tan hermosa, y a ellos los vi muy sorprendidos”.

B.D.N. / E.G.A.