“Para mí, la escritura y la lectura siempre fueron un refugio. Cuando me llegó la propuesta de contar mi historia, si bien sabía que me iba a volver a exponer, porque iba a poner mucho de mí, me pareció un espacio de resguardo, porque el trabajo iba a ser mío, con mis palabras. Y era una forma de volver a apropiarme de mi historia”.
Así, la actriz Thelma Fardin cuenta acerca del proceso que la llevó a escribir “El arte de no callar”, el libro autobiográfico en el que estuvo trabajando los últimos meses, que presenta hoy en la Feria del Libro. Y que se enmarca entre los títulos que Editorial Planeta publica con el eslogan “ahora que sí nos leen”, que remite a la consigna “ahora que si nos ven” que se repite en las marchas de mujeres. “Agruparse en esa línea me pareció el momento adecuado. Sentía que tenía mucho para decir, necesitaba ese espacio y esa libertad que me podía permitir el libro propio", dice a Perfil.
A lo largo de los capítulos cuenta su testimonio y vivencias a partir de la denuncia que hizo el año pasado contra Juan Darthes, que de alguna manera también la convirtió en la voz de miles de víctimas de abuso que a partir de su testimonio hablaron. Muchas de esas historias le llegan a través de las redes sociales, y a esas personas busca hablarles, y que el libro sea una herramienta.
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“Uno de los objetivos es que sea una voz directa que le habla a todas esas personas que buscan hablar conmigo, algo que también da cuenta de la falta de contención que existe. Se generó algo fuerte, como una especie de cadena de favores, que tiene que ver con esto de que yo hablé porque alguien habló, y otros hablaron porque yo hablé. Entonces que mi recorrido, que es propio, pueda servir a otras personas a que se sientan acompañadas”.
La bajada del título, “entre el silencio y la impunidad”, también le habla a las víctimas. “Son los dos paréntesis que marcan esta situación. Porque primero estás atada al silencio, pero después te encontrás con un sistema que no siempre da respuesta, o no coincide con los tiempos de las víctimas. Y cuando sos la denunciante pueden pasar años hasta tener un resultado, o puede no pasar nada. Y tu agresor puede terminar llevándote a vos a la Justicia”.
Por eso, incluye datos y estadísticas globales en lo que refiere a abuso sexual, donde "se estima que de mil abusos, solo cien se denuncian, y de esos cien, solo uno llega a sentencia", explica. También que las denuncias falsas son un porcentaje muy menor. Y suma entrevistas a Paula Wachter, directora de Red por la Infancia; y a la psicóloga Maria Beatriz Muller, que hablan del recorrido que atraviesa una víctima de abuso. En otro capítulo hace un “un llamado a la acción”, vinculado a la campaña que inició en Change.org para que los delitos de abuso sexual en el país no prescriban.
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“Antes me sentía débil, frágil. Por eso cuando pongo todo en la balanza, y esto es a título personal, hablar sigue siendo lo mejor que pude hacer, aunque se pagan costos altísimos. Pero te encontrás con gente que está del mismo lado y yo me refugié mucho en esas personas que me escriben y me dicen que gracias a mi denuncia pudieron hacer tal cosa. Entonces, si esto sirve para que una persona del otro lado se sienta acompañada ya está. Es sanador para alguien que lo atravesó, y salió adelante, poder ser esa luz al final del camino para alguien que está en el medio de la tormenta".
En lo que refiere a la denuncia contra Darthes, empiezan a darse los primeros avances. Desde Nicaragua se hizo un pedido, a través de Cancillería, para que se produzca prueba en Argentina, con testimoniales de quienes consideren testigos en la causa, que se darían en las próximas semanas.
El libro se presenta hoy en la Feria del Libro, a las 18.30, en la Sala Tulio Halperin Dongui, donde la autora estará acompañada por las periodistas Luciana Peker e Ingrid Beck, y el filósofo Dario Sztajnszrajber.
