El beso de Chávez y Vicuña ya es un hito de la televisión argentina. Como aquel de hace más de veinte años entre Gerardo Romano y Rodolfo Ranni, en Zona de riesgo. Lo cierto es que la repercusión, impresionante en las redes sociales, no trajo aparejado un aumento del rating de la tira Farsantes, que mantuvo su promedio (14 puntos) y perdió –por unas décimas– con Celebrity Splash (y después Susana Giménez).
Es más, en similares condiciones, otros besos –heterosexuales, de protagonistas de novelas televisivas– sí tuvieron un público extra, según las mediciones. Tal el caso –en la misma Farsantes– del beso entre Facundo Arana y Griselda Siciliani, que tuvo un punto más de rating que el promedio (15). O, en Solamente vos, el beso entre Natalia Oreiro y Adrián Suar, que sumó más de 18 puntos.
Claro que hay muchas situaciones a analizar y no todo es tan lineal como para pensar que un “homobeso” no suma rating y un “heterobeso” sí. Como analiza Martín Rodríguez, editor de Television.com.ar: “La lógica diría que un beso heterosexual es más popular todavía, más aceptado en términos generales. Pero también es algo que tiene que ver con la tira. La tira Solamente vos es más popular”. Pero, a diferencia del de Romano-Ranni, no tiene efectos sociológicos iguales a los de los 90.