Luego del “problema técnico” que se produjo ayer a la mañana en la estación Juan M. de Rosas de la línea B que causó demoras e incidentes con el chofer de una formación y obligó al desalojo de la estación por parte de efectivos de la Policía Metropolitana, un fuerte cruce de acusaciones se registró ayer entre la empresa Metrovías y los empleados agrupados en la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y del Premetro (Agtsyp).
Desde Metrovías afirmaron que el problema se originó por un sabotaje en las instalaciones y divulgó fotos. Además indicaron que se hicieron denuncias y que investigan el hecho a fin de identificar a los responsables. “Es lamentable confirmar una vez más que hay personas que intencionalmente buscan afectar el servicio y perjudicar a los más de 300 mil usuarios de la línea”, indicó Lucía Ginzo, de Metrovías.
Los metrodelegados, a través de Roberto Pianelli, secretario general del gremio, dijeron que esa acusación es falsa. Y amenazaron: “Si no se cumplen mínimas condiciones de seguridad, desde el martes próximo las formaciones no llegarán a las estaciones Echevería y Rosas”.
En un comunicado, Metrovias reafirmó que están dadas las condiciones de seguridad para operar el servicio en el tramo Echeverría-Rosas de la línea B. “Tras una inspección realizada hoy (por ayer) en la cochera J. M. Rosas, la Dirección General de Protección del Trabajo (GCBA), asegura que están dadas las condiciones de seguridad e higiene para su normal funcionamiento y operación. Dicha inspección se llevó a cabo de acuerdo a lo establecido en el acta acuerdo firmada el martes 13 de agosto, en forma conjunta con representantes de Sbase, Metrovías y la autoridad laboral”. Los representantes de la Agtsyp estaban convocados para participar, pero no asistieron. Sobre la oferta de servicio, que según los metrodelegados es realizada sólo con 16 formaciones, la concesionaria aclaró que “la flota disponible en la hora pico del jueves fue de 18 trenes, mientras que para ayer viernes se habían diagramado 19 formaciones. Sin embargo, no se pudo operar con este esquema debido a las complicaciones generadas a raíz del sabotaje que afectó al servicio y a las demoras que se generan en el recambio de conductores en la estación Lacroze”, concluyó el comunicado de la empresa.