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“Fue muy emocionante, el desafío de un hombre contra una máquina. Ganó, pero yo siempre le tuve fe a mi bondi”. Así resumía Néstor, el chófer de la línea 59, la experiencia de enfrentarse con su colectivo a Usain Bolt, el hombre más rápido del mundo. Cerca de las 17.30 de ayer el jamaiquino, campeón mundial y olímpico y recordman en 100 y 200 metros, participó de una exhibición en uno de los carriles del Metrobus sobre la avenida 9 de julio, frente al Teatro Colón, entre Tucumán y Viamonte.
Sin demasiado esfuerzo, prácticamente trotó los 80 metros para cruzar la cinta celeste y blanca que marcaba la llegada, sostenida por el jefe de gobierno porteño Mauricio Macri.
Al finalizar el evento, recibió la camiseta de Racing y el carnet que lo acredita como el socio número 77.550. Su veloz afiliación comenzó a partir de una iniciativa de las agrupaciones Paso a Paso y Racing Integrado, en conjunto con autoridades de la institución de Avellaneda. El deportista lo recibió sonriente, a pesar de que al ser consultado sobre si era “hincha” de algún equipo argentino, respondió que era de Gimnasia de La Plata, el cuadro del empresario Guillermo Marín, principal responsable de su visita al país.
Por la mañana, el atleta de 27 años dio una clínica con los chicos que participan de las escuelas deportivas en el Parque Sarmiento. También firmó un acta de compromiso por los “Derechos de los Niños Deportistas”, promovida por la Defensora Adjunta del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, Graciela Muñiz.
El día anterior estuvo en el comedor Los Piletones, de Margarita Barrientos. “Fue muy lindo estar con chicos. Vi uno que tenía un tatuaje de Bob Marley. Hasta ahora, eso y el clima fue lo que más disfruté”, comentó.
En una conferencia de prensa que dio durante su paso en nuestro país el deportista de elite reconoció que sueña con “bajar los nueve segundos” en los 100 metros y ganar los Juegos Olímpicos por tercera vez consecutiva, “algo que nunca se hizo”, en Río de Janeiro 2016.
Sobre lo que más disfruta de su profesión, Bolt sostuvo: “Me gusta correr para una multitud y me encanta la gente que tiene una gran energía y valora el esfuerzo que uno hace para correr lo más rápido posible”.
