Gustavo Menéndez es una voz de peso dentro del peronismo. Sobre todo en Buenos Aires: ahí es intendente de Merlo, una de las localidades más pobladas, y vicepresidente del PJ de esa provincia. Por eso no es menor que le tire un guiño al líder del Frente Renovador, Sergio Massa, diciendo que "es natural" que lo que nació a la par se vuelva a juntar, en referencia a su pasado K. También resuena, cuando asegura ante los alumnos de periodismo de la Escuela de Comunicación de Perfil, que hay "pruebas irrefutables" de que Florencia Kirchner, la hija de la expresidenta, es víctima de un "acoso mediático y judicial" de parte del gobierno de Mauricio Macri.
- ¿Cree qué Florencia Kirchner es víctima del gobierno de Macri?
- Sin lugar a dudas: hay pruebas irrefutables de que es así. Si Florencia Kirchner se llamara Florencia Gómez no estaría viviendo la situación de acoso mediático y judicial que está sufriendo ella, que está muy claro que tiene un problema de salud evidente y constatado por distintos peritajes. Aún así, hay una Justicia que muchas veces pretende agradar al Poder Ejecutivo, y Florencia es víctima de esa situación. No me cabe ninguna duda de que cierto sector de la Justicia que responde al Gobierno ha hecho un trabajo de presión sobre la ex Presidenta, atacando a su hija.
- Usted ha afirmado, antes de que Florencia Kirchner se fuera a Cuba, que “el pueblo no se iba a quedar de brazos cruzados” ante esa situación. ¿En qué se basa para decirlo?
- Es que eso es lo que está sucediendo. El éxito editorial de un libro que escribe Cristina tiene que ver con la necesidad que tiene un pueblo de encontrar un liderazgo que se vea identificado con la defensa de sus intereses. El pueblo no se va a quedar con los brazos cruzados para que las cuestiones que deben dirimirse en el campo de la política se diriman en otros espacios. Creo que el pueblo ha sufrido un engaño tremendo y fatal de parte de Cambiemos, ya que no han cumplido con una sola promesa de campaña, no han hecho lo que dijeron que iban a hacer y han hecho lo que dijeron que no iban a hacer.
- Usted está cerca de Máximo K y del grupo de intendentes de ese espacio de Buenos Aires. ¿Qué perfil de gobernador le gusta más? ¿Axel Kicillof o Martín Insaurralde?
Tanto Martín, como Verónica Magario, tienen la solvencia y el conocimiento necesario para hacerse cargo, pero Axel Kicillof, que ha sido Ministro de Economía y que hoy puede caminar la calle tranquilo, también está preparado. Es un hermoso lío que tenemos, porque como mínimo tenemos tres candidatos con muchas condiciones, a los que también se pueden sumar otros candidatos como Sergio Berni o como Julián Dominguez, o como el intendente “Paco” Durañoña y el periodista Santiago Cúneo.
- ¿Qué opinión tiene del llamado “Plan V”, el intento para promover a Vidal como candidata a presidenta?
- El gobierno nacional, en connivencia con el gobierno provincial, están buscando la alquimia que les permita tener alguna chance después del evidente fracaso de su gestión. Más allá de las diferencias personales, por historia de vida y demás, que puede haber entre el presidente y la gobernadora, son parte del mismo programa a los efectos electorales, institucionales. Mauricio Macri y María Eugenia Vidal son lo mismo.
- ¿Massa tiene que ir adentro del frente político contra el macrismo?
- Creo que el campo popular, con eje en el peronismo, tiene que tener la inteligencia política y el equilibrio emocional de confluir. Necesitamos una unidad que nos dé el triunfo en estas elecciones, y es con todos, pero fundamentalmente con Cristina Fernández de Kirchner adentro. No sé si como candidata o no, pero sí siendo una de las principales figuras. Lo que le digo a los compañeros como Sergio, y como muchos otros, es que el único límite que tenemos que tener es Macri. Massa y Cristina, y muchos otros, estuvieron juntos en algún momento de la historia, y todo lo que por naturaleza nace unido al final tiene la posibilidad de volver a juntarse. Tanto Sergio como muchos otros compañeros que han seguido otros caminos en los últimos años están invitados a ser parte de algo mucho mayor de lo que ellos han podido construir.
Por Liliana Chimenti y Nicolás Ponce
(Alumnos de primer año de la Escuela de Comunicación de Perfil)
