"No es una ola lo que está pasando, es un tsunami". Con esta frase, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, describió en conferencia de prensa la situación epidemiológica que atraviesa el distrito ante la segunda ola de Covid-19. Además, no descartó volver a Fase 1 de la cuarentena si el panorama empeora: "Se van a tomar todas las medidas que haya que tomar", advirtió.
El mandatario habló este jueves 8 de abril ante la prensa para detallar las medidas que la provincia tomará luego de que el Gobierno nacional anunciara las nuevas restricciones para todo el país. Alineado con la Casa Rosada, el gobernador bonaerense mantendrá las mismas limitaciones dispuestas por Nación, aunque con mayor o menor rigor según la situación epidemiológica de cada municipio.
"Ayer se batió un récord llegando a los 10 mil casos es la provincia de Buenos Aires. Es impresionante la velocidad en la que están creciendo los contagios", precisó Kicillof esta mañana desde el Salón Dorado de la Casa de Gobierno de La Plata. Y sostuvo que "la situación cambió violenta y súbitamente" respecto de la relativa calma epidemiológica de las últimas semanas.
"Es un espanto lo que está pasando con el uso de terapia intensiva. Antes de esta semana teníamos 60 por ciento de ocupación en esa terapia intensiva. En ese mismo lugar hoy hay 90 por ciento", detalló el gobernador sobre la visita a un centro de salud este miércoles.
Provincia de Buenos Aires: restricciones por municipio
A diferencia del Gobierno porteño, que marcó algunas diferencias respecto de las medidas de Nación luego de las críticas de Juntos por el Cambio a la Casa Rosada, Axel Kicillof elogió las decisiones de Alberto Fernández.
"Ayer el presidente anunció una serie de medidas, esas medidas se van a acatar al pie de la letra en la provincia de Buenos Aires", anticipó el gobernador. Luego especificó que las restricciones se adecuarán según la situación de cada municipio.
- Los municipios en Fase 5, con menor circulación del coronavirus, limitarán la restricción horaria de circulación de las 2 a las 6 de la mañana.
- Los distritos en Fase 4, tendrán "toque de queda" de las 0 a las 6.
- Los municipios de Fase 3, también limitarán el tránsito callejero de 0 a 6. Además cerrarán los locales gastronómicos a las 23 y el resto de los comercios a partir de las 20.
Kicillof prometió "severas multas" para locales que no cumplan con los cierres y dijo que se coordinará con los intendentes para liberar el estacionamiento en las zonas céntricas de cada distrito.
"Para los que no cumplen, tiene que haber sanciones", remarcó, aunque deseó "que no haya que poner multas, porque se comprenda la gravedad de la situación y el riesgo que corremos".
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Críticas a la oposición
Kicillof fue muy duro en sus cuestionamientos a la oposición —en particular, aunque sin nombrarlos, a Juntos por el Cambio— por criticar las medidas de cuidado.
"Sé que algunos no respetaron la angustia de nuestro pueblo y llamaban a no cuidarse e incumplir medidas públicas y privadas. Atacaron todo lo que se hizo. Sabemos que atacaron el proceso de vacunación", reprochó.
"Llevamos un año batallando con esta pandemia sin que lograra desbordar nuestro Sistema de salud", dijo el mandatario provincial. Y remarcó: "Prefiero ampliar hospitales que construir cementerios".
"Esos que dicen que ahora no hay que hacer nada ni poner ningún tipo de medida son los mismos que después, si desborda el sistema sanitario, van a venir a decir '¿cómo no previeron que esto iba a pasar?'. Y nos dejaron un sistema sanitario absolutamente destrozado, desinvertido, abandonado", continuó.
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Kicillof no descartó una vuelta a Fase 1
Consultado sobre la posibilidad de volver a una Fase 1 de la cuarentena como la que rigió en 2020, Kicillof no lo descartó ante un escenario de rebrote. "Se van a tomar todas las medidas que haya que tomar", anticipó.
"Cuando ya parecía que estaba todo dicho, mutó el virus y ahora hay cepas más contagiosas. Los mismos cuidados de antes ahora no alcanzan. No solo hay que volver a lo de antes sino que hay que extremar los cuidados, sabiendo que corremos contra la posibilidad de vacunar", describió el gobernador.
"Hace una semana era mucho más intenso el crecimiento de casos en la Ciudad de Buenos Aires, pero viendo lo que empezó a ocurrir en la ciudad, y a la velocidad a la que venía, nosotros pensamos que había que hacer un cierre muy fuerte durante un tiempo limitado", agregó.
Kicillof planteó que "a veces la decisión no es cerrar o no cerrar ciertas actividades, sino si cerrar antes o después de un desborde; por lo menos eso es lo que hemos visto en la realidad europea". Y sostuvo: "Intentamos sostener el funcionamiento a pleno y restringir lo menos posible, pero cuando empieza a acelerarse tanto lo que hay que evitar es el desborde, porque si hay desborde después el cierre es mucho más duro y tardío".
En este marco, aseguró: "Se van a tomar todas las medidas que haya que tomar". Y completó: "Yo creo que hoy hay una prioridad muy grande, además de cuidar la actividad económica y de seguir con la presencialidad. Cuando está en riesgo el desborde del sistema sanitario, con más muertos y más enfermos, hay que poner arriba de todo a la salud y a la vida de la gente".
AB/FF
