Los medios italianos se hicieron eco del apagón generalizado que dejó sin energía a toda la Argentina, Uruguay y parte de Brasil el pasado domingo 16 de junio.
En su edición de este martes Il Fatto Quotidiano hace un racconto de la situación energética del país y destaca el hecho de que parte del sistema involucrado pertenece a Enel, una empresa distribuidora de energía de capitales italianos, que llegó al país en 1992 durante las privatizaciones del menemismo.
En este contexto, el medio europeo habla de una red "obsoleta y exprimida" con "pocas inversiones a pesar de los aumentos de precios".
"Durante el apagón que duró 14 horas y afectó a 50 millones de personas, muchos argentinos recordaron los cortes, de menor magnitud, sucedidos en 1982 durante la guerra de Malvinas, y luego en los gobiernos kirchneristas (2003-2015) y, más recientemente, con Mauricio Macri, cuando, el verano pasado los distritos periféricos de Buenos Aires sufrieron cortes de electricidad que duraron varios días, provocando protestas de los ciudadanos", relata el artículo.
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"Hasta 2015 y por decisión del ex presidente argentino Néstor Kirchner, el Estado intervino en el sector de la energía con subsidios que llegaron a cubrir el 80% del costo de las facturas: un hecho que, en la práctica, significó un costo para los usuarios más bajo que el de una taza de café", expresa.
Y continúa: "Pero, al mismo tiempo, causó apagones repentinos debido en parte al uso exagerado de los electrodomésticos. En 2015, con el triunfo de Macri en el poder, se decidió reducir gradualmente estos subsidios".
"Fue así que el entonces ministro de Energía, Juan José Aranguren, comenzó una serie de aumentos en las tarifas que, en lo que respecta a la electricidad, han llegado a superar el 500% en Buenos Aires y el 250% en el resto del país", describe.
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Asimismo, el artículo hace referencia a Edesur, la distribuidora de energía perteneciente a Enel. "Edesur ha realizado grandes inversiones en los últimos años, destinadas a modernizar su red, al tiempo que está iniciando en la provincia de Chubut un proyecto eólico destinado a explotar el inmenso capital energético que los vientos de esa región producen", expresa.
Finalmente, el periódico italiano reconoce que "lo que más enfurece a los usuarios es que, frente a los costos que afectan gravemente a los presupuestos familiares, el suministro de electricidad continúa produciendo apagones. Algo totalmente injustificado ante las ganancias que, en 2019, se espera que sean 180 millones de euros".
MS/ CP