A primera hora de este miércoles 23 de junio, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) inició un nuevo paro del transporte urbano por tiempo indeterminado en la ciudad de Córdoba.
Frente al incumplimiento de las empresas —que, denuncian los empleados, no abonaron ayer el adelanto del mes de junio— el gremio que nuclea al transporte urbano de pasajeros de Córdoba afirmó que el paro regirá hasta que se acredite el depósito en las cuentas de todos los trabajadores.
La decisión se tomó luego de una reunión entre delegados del gremio, la Municipalidad de Córdoba, miembros de la Federación de Empresarios del Transporte Automotor de Pasajeros (FETAP) y directivos de Transporte Automotor Municipal Sociedad del Estado (TAMSE), quienes no lograron acordar el pago del adelanto de haberes correspondiente al mes de junio, según informó UTA.
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“La junta ejecutiva de la UTA Córdoba, juntamente con el cuerpo de delegados, han tomado la decisión de realizar retención de tareas desde las 0 de este miércoles. Las medidas de fuerza se mantendrán hasta tanto se acrediten los fondos en la cuenta de los trabajadores”, indicó el gremio en un comunicado que lleva la firma de la secretaria general, Carla Esteban.
Y remarcaron: “La retención de tareas es una solución efectiva que otorga el derecho al trabajador al permitirle ausentarse de su empleo y con ello interrumpir su sufrimiento y desgaste cuando hay: incumplimiento de las obligaciones del empleador, persecución al trabajador, maltrato o mobbing al trabajador, modificación indebida de las condiciones de trabajo o reducción del salario ilegal”.
Reparto de los fondos
En tanto, el subsecretario de Transporte, Gonzalo Guevara dijo a La Voz que en este miércoles se realizará una reunión entre las partes para llegar a una solución. Además, explicó que los subsidios nacionales del mes en curso aún no fueron depositados por Nación, al tiempo que reiteró el reclamo para que el reparto de fondos sea equitativo respecto del AMBA.
Hasta la fecha, Nación aporta 180 millones de pesos mensuales, mientras que el Gobierno provincial aporta 90 millones y la Municipalidad de Córdoba, otros 60 millones en subsidios.
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Frente a la decisión del Ejecutivo nacional de no aumentar los giros hacia el interior, las otras alternativas que maneja la administración del intendente cordobés, Martín Llaryora, es aumentar el boleto o incrementar los subsidios.
Desde la FETAP, dijeron que es “inviable” el negocio del transporte.
Esta medida es la segunda en el mes, luego de que el pasado sábado 5 de junio UTA Córdoba lanzara un paro total que se extendió por tres días, tras los cuales los colectivos comenzaron a circular con frecuencia reducida.
CFT/FF