Le avisaron en medio del acto en Ensenada, pero guardó silencio sobre el tema. Luego todos los ojos se posaron en su cuenta de Twitter, para ver que diría Cristina Kirchner de la renuncia de Martín Guzmán en Economía, una tarea a la que dedicó cartas y empeño, no solo suyos, también de su hijo Máximo, casi toda La Cámpora, buena parte de los dirigentes sociales que le responden, hasta golpear las puertas mismas del despacho de Alberto Fernández. Pero los mensajes que llegaron desde el sillón vicepresidencial no mencionaron la palabra Guzmán.
No habló de ministros, ni de renuncias. Al punto que fue breve, casi críptica. Solo habló de Perón, de jugar a las bochas y apuntó que el mejor homenaje que podía hacerse al General era "ver que hizo para tratar todos los días de acercar un poquito el bochín". Agradeció, además, el fervor y los aplausos que recibió en su paso por Ensenada. Esa "música en sus oídos", vale señalarlo, coincidió en el momento de la tarde en que explotaban en redes las 7 páginas de la renuncia de Guzmán.
"Hermoso acto en Ensenada junto a miles de compañeros y compañeras, homenajeando a Perón. El mejor homenaje que podemos hacerle es ver lo que hizo y tratar, todos los días, de acercar un poquito el bochín", así de puntual fue el mensaje de la vicepresidenta en Twitter:
Hermoso acto en Ensenada junto a miles de compañeros y compañeras, homenajeando a Perón. El mejor homenaje que podemos hacerle es ver lo que hizo y tratar, todos los días, de acercar un poquito el bochín. pic.twitter.com/w8K37CWXAf
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) July 2, 2022
Y algunos minutos después, un segundo posteo de la exmandataria dejó en la cuenta de Twitter el texto completo de lo que había dicho en Ensenada, para quienes no habían podido verla o escucharla en vivo:
Comparto con ustedes el discurso completo “A 48 años del fallecimiento de Perón: Argentina, política y economía” ✌🏽https://t.co/RFEDmIcPUR
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) July 2, 2022
Cayó la noche y tampoco aparecieron menciones a Guzmán. Mientras tanto, seguían las candentes reuniones en Olivos, con Alberto Fernández buscando la forma de volver a "ganar perdiendo". El sillón de Economía espera. Y el lunes por la mañana también.
HB