La noche en Kiev, la sitiada capital ucraniana, transcurrió en extrema tensión y entre las explosiones que producían choques armados en las afueras de la ciudad, aunque el ataque masivo que anticipó el presidente Volodimir Zelensky no se produjo y la capital seguía bajo control ucraniano.
"No podemos perder la capital. Me dirijo a nuestros defensores, hombres y mujeres de todos los frentes: esta noche, el enemigo va a utilizar todas sus fuerzas para romper nuestras defensas de la forma más vil, dura e inhumana. Esta noche, van a intentar un ataque", había dicho Zelenski en un video publicado en la página web de la presidencia a última hora del viernes.
Las tropas invasoras lanzadas el jueves por el presidente ruso Vladimir Putin llegaron en la mañana del viernes a un barrio del norte de Kiev, pero el avance pareció luego perder fuerza. Durante la noche hubo avanzadas esporádicas, y mandos militares ucranianos señalaron que "se ha repelido un ataque nocturno de las fuerzas rusas contra una de sus posiciones en la avenida de la Victoria".
"El ataque ha sido rechazado", precisó el mensaje del ejército de Ucrania en un mensaje en su cuenta de Facebook, aunque sin dar más precisiones sobre el lugar exacto de estos combates.
Junto al mensaje, el ejército publicó una fotografía de una gran columna de humo elevándose en medio de una zona urbana en plena noche. El presidente ucraniano Volodimir Zelenski había alertado previamente de una noche crucial en la que Rusia iba a usar "todas sus fuerzas" para intentar hacerse con la capital. En el centro de Kiev, periodistas de AFP escucharon fuertes explosiones durante la madrugada.
En un comunicado distinto, el ejército ucraniano también informó de "duros combates" en curso en Vasilkov, a una treintena de kilómetros al suroeste de Kiev, donde los rusos "intentan descargar paracaidistas".
El jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, había elogiado horas antes a las fuerzas ucranianas, "que están luchando con valor y siguen teniendo capacidad de causar pérdidas a las fuerzas invasoras rusas".
La ofensiva rusa provocó la huida de más de 50.000 ucranianos del país, así como 100.000 desplazados internos (según la ONU) y más de 100 muertos y centenares de heridos (según Kiev).
Las imágenes en vivo de algunos puntos de Kiev fueron seguidas en todo el mundo durante la noche. Se oía disparos y se veían amplias zonas a oscuras.
Vladimir Putin llamó al ejército ucraniano a "tomar el poder" y calificó al gobierno de Zelenski de "banda de drogadictos y de neonazis". El mandatario ruso llamó este viernes al ejército ucraniano a tomar el poder en el segundo día de la invasión, que ha provocado la huida de más de 50.000 ucranianos del país, así como 100.000 desplazados internos (según la ONU), y más de 100 muertos (según Kiev).
En una intervención televisiva, el mandatario ruso calificó al gobierno de Zelenski de "banda de drogadictos y de neonazis" y afirmó, dirigiéndose a los militares ucranianos: "Tomen el poder entre sus manos. Me parece que será más fácil negociar entre ustedes y yo". Zelenski respondió colgando un video delante del palacio presidencial.
"Estamos todos aquí, nuestros militares están aquí, los ciudadanos, la sociedad, estamos todos aquí, ellos atacarán esta noche y estamos defendiendo nuestra independencia, nuestro Estado", proclamó, junto a algunos de sus principales colaboradores. Zelenski alabó el "heroísmo" de la población ante el avance de Rusia hacia la capital.
Mientras tanto, el jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, también elogió a las fuerzas ucranianas, "que están luchando con valor y siguen teniendo capacidad de causar pérdidas a las fuerzas invasoras rusas". Un alto cargo de la defensa estadounidense (que prefirió mantener el anonimato), afirmó que la ofensiva rusa estaba perdiendo fuerza, sobre todo en Kiev, debido a la resistencia de los ucranianos.
El Ministerio de Defensa ucraniano afirmó que sus tropas habían matado a 2.800 soldados rusos, pero sin aportar pruebas. Moscú no comunicó hasta ahora ningún reporte de bajas. Zelenski indicó que habló con su homólogo estadounidense Joe Biden sobre el "refuerzo de las sanciones [contra Rusia], de una asistencia de defensa concreta y de una coalición antiaérea", y expresó su "agradecimiento" por el "fuerte" respaldo estadounidense.
La OTAN activará sus planes de defensa "para impedir excesos contra territorios de la Alianza", dijo Stoltenberg. Se trata de la Fuerza de Respuesta, un cuerpo formado por 40.000 militares y cuya punta de lanza, la Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad (VJTF), cuenta con 8.000 miembros.
Cuerpos tirados en las calles
Al caer la noche se escuchaban disparos y explosiones en el barrio residencial de Oblon, en el norte de Kiev, provocado por lo que parecía una avanzada de las fuerzas rusas. Periodistas de la AFP vieron un muerto en la acera y ambulancias socorriendo a una persona cuyo vehículo fue aplastado por un blindado.
Durante el día, las sirenas y explosiones no dejaron de sonar en Kiev, una ciudad que, tras la huida de muchos habitantes, ofrece un aspecto fantasmagórico. Vehículos blindados y soldados vigilan los cruces de las calles en torno al distrito donde se encuentran los edificios del gobierno.
Las fuerzas ucranianas informaron el viernes que estaban combatiendo a las unidades rusas en Dymer e Ivankiv, dos localidades situadas a 40 y 80 kilómetros al norte de Kiev. Los rusos estarían avanzando también por el noreste y el este, según la misma fuente. El Ministerio de Defensa llamó a la población a resistir.
"Pedimos a los ciudadanos que nos informen de los movimientos de tropas, que fabriquen cócteles Molotov y neutralicen al enemigo", dijo. Putin está dispuesto a enviar una delegación a Minsk, capital de Bielorrusia, un país aliado de Rusia, para llevar a cabo negociaciones con Ucrania, indicó su portavoz. El vocero de la diplomacia estadounidense, Ned Price. calificó esa propuesta de "diplomacia se lleve a cabo a punta de pistola, cuando las bombas, los disparos de mortero y la artillería de Moscú apuntan a los civiles" ucranianos.
Más sanciones al Kremlin
Rusia exige de Ucrania que abandone su ambición de unirse a la OTAN y pide que la Alianza Atlántica que reduzca su presencia en el este de Europa. Tras la ofensiva, la Unión Europea (UE) desbloqueó el jueves un paquete de sanciones "masivas" en los sectores energéticos y financiero.
Putin y su canciller Serguéi Lavrov fueron incluidos este viernes en la lista de personalidades sancionadas, con sus haberes congelados, por la Unión Europea (UE) y el Reino Unido. Estados Unidos anunció que tomaría medidas similares. Zelenski pidió a los occidentales que expulsaran a Rusia del sistema de transferencias bancarias SWIFT, pero países de la Unión Europea como Alemania o Hungría han expresado sus dudas por el miedo a que esa medida provoque problemas en la entrega de gas ruso.
La portavoz de la cancillería rusa, Maria Zajarova, afirmó que las sanciones contra Putin y Lavrov demuestran "la impotencia" de los occidentales. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) rechazó el proceso de adhesión de Rusia y cerró su oficina en Moscú.
AFP/HB