Escrutadas el 99,83% de las mesas, en Córdoba Juntos por el Cambio redondea 1.060.000 votos. Representan el 54,05% de los cordobeses, 7 puntos más que los números que habían dejado las PASO, unos 200 mil votos más que en esos comicios de septiembre, cuando en la interna opositora los radicales Luis Juez entre los aspirantes al Senado y Rodrigo de Loredo a Diputados ganaron ampliamente, entonces con cerca del 47% de los sufragios.
Luego llegarían las polémicas declaarciones del presidente Alberto Fernández pidiendo que "de una vez por todas Córdoba se integre al país, que de una vez y para siempre sea parte de la Argentina y no esta necesidad de siempre parecer algo distinto", llamando al electorado del distrito mediterráneo como "hostil", palabras que tuvieron un efecto volcánico en los números de este domingo, y que lamentan incluso en el sector del gobernador Juan Schiaretti, cuya "diferenciación" a nivel nacional del kirchnerismo tampoco le alcanzó para quedar a salvo del volcán electoral encabezado por Juez y De Loredo. Justamente de Loredo había dicho en Diario PERFIL de este fin de semana que "el radicalismo procurará gobernar en la provincia de Córdoba".
La debacle del kirchnerismo fue total, apenas alcanzó a superar el 10 por ciento de los votos, quedando afuera del Senado en duro golpe a la conformación de la Cámara Alta que respondía a Cristina Kirchner, y consiguiendo apenas un diputados entre los 9 que estaban en juego.
Los números iniciales del escrutinio mostraban el domingo por la noche claridad respecto a que los senadores cordobeses serían dos para Juntos por el Cambio y uno para Hacemos por Córdoba, el sector que responde a Schiaretti, pero en cambio se mantenía la duda sobre un sexto diputado para la coalición opositora. En efecto, el conteo inicial le daba 5 diputados a JxC, dos a Schiaretti y uno al Frente de Todos, pero desde Hacemos Córdoba se ilusionaron en determinado momento con un tercer legisladores, que finalmente se convirtió en un sector para Juntos por el Cambio.
A la vista de los resultados, el nombre del intendente de Córdoba Martín Llaryora también quedó complicado, y bastan un par de números para citar la derrora del peronismo cordobés: el "schiaretismo" con Alejandro Vigo, la esposa del gobernador, y Natalia de la Sota, también dueña de un apellido histórico, quedó a casi 30 puntos de JxC (54% a 25%). Y el Frente de Todos del kirchnerismo local cerraba con 10,48%. Había quedado a 44 puntos de Juez y de Loredo. Más hostiles que nunca.
HB
