Alberto Fernández realizó un acto oficial en el Museo del Bicentenario en la Casa Rosada para anunciar la realización del III Foro Mundial de Derechos Humanos y se volvió viral. Sin embargo, el mandatario no acaparó la atención de las redes por su discurso sino por una curiosa equivocación.
Mientras le agradecía a los diferentes actores sociales, Fernández hizo una mención especial para Ignacio "Nacho" Levy, director de la revista Garganta Poderosa, con la diferencia de que en vez de "poderosa" dijo "profunda".
"Garganta Profunda": la confusión de Alberto Fernández al hablar de la "Garganta Poderosa"
Los usuarios de internet no le dejaron pasar la equivocación e inundaron las redes de memes al respecto, incluyendo algunos alusivos a Los Simpson y a "Elo Podcast", quien realiza entrevistas con alto contenido sexual.
Twitter fue la red social elegida por la gran mayoría de los usuarios para compartir los memes del Presidente. Además, "Garganta Profunda" se volvió tendencia durante unas cuentas horas.
Los Simpson, como suele suceder en general, fueron la herramienta preferida para generar memes del tema, como también se sumaron algunos en alusión a Elo Podcast y la famosa frase: "Ah mirá que pícara que sos"
¿Qué es "Garganta Profunda"? Desde película porno al FBI y el Watergate
Deep Throat , en español “Garganta profunda”, es el nombre de una clásica película porno estadounidense que se estrenó en 1972 y tiene como protagonista a la actriz de la época Linda Lovelace.
La historia se basa en que la protagonista solo puede alcanzar su punto máximo de placer a través del sexo oral, debido a ciertas disposiciones físicas. El revuelo que provocó esta película fue tan grande que se convirtió en la primera producción pornográfica en llegar al cine.
Garganta profunda: Alberto Fernández, el porno y los off del círculo rojo
A su vez, este fue también el apodo que se le asignó Mark Felt, infiltrado del FBI en el caso Watergate que reveló todo lo que sabia sobre la causa al Washington Post y desató un escándalo que terminó con la renuncia del en ese momento presidente de Estados Unidos, Richard Nixon.
El escándalo de Watergate dejó al descubierto el accionar y las actividades ilícitas de Nixon, republicano, contra sus adversarios demócratas, ya que ordenó a agentes del FBI cercanos a él pinchar los teléfonos y colocar micrófonos en la sede del partido azul norteamericano.
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