Los incendios de pastizales que afectan las islas del Delta del río Paraná, entre el sur de Santa Fe y Entre Ríos y la costa norte de Buenos Aires, fueron descriptos este lunes 30 de agosto como "sin precedentes" debido a la crecida de las llamas.
El humo por la quema de pastizales en islas, que tienen jurisdicción entrerriana y otras de Santa Fe, afectó enormemente a la ciudad de Rosario y otras localidades bonaerenses como los son Villa Constitución, Ramallo y San Nicolás.
Brigadistas de las tres provincias y del Servicio Nacional de manejo del Fuego, con el apoyo de helicópteros y aviones hidrantes, trabajaban para controlar los extensos incendios durante horas, algunos inclusos sin resultados favorables.
El olor a quemado llegó a sentirse tanto por la tarde como en la noche del lunes, principalmente en la ciudad de Buenos Aires y alrededores. El malestar se vio incrementado por la falta de sin lluvias, a lo que se agrega a la histórica bajante del río Paraná.
"Nunca se vio tanta quema", expresó el director de Bomberos Zapadores de la provincia de Santa Fe, Andrés Lastorta, mientras ese cuerpo realizaba denodados esfuerzos para contener las llamas que se replicaban de distintos puntos.
La acción del hombre, que intenta extender la frontera agrícola, es fundamental en el desastre ecológico. "La gente prende fuego sin tomar dimensión del daño que está generando al ambiente y a las personas", reflexionó Lastorta a medios locales.
Preocupa la bajante del río Paraná, que ya alcanzó un mínimo histórico
La ministra de Ambiente y Cambio Climático de Santa Fe, Erika Gonnet, expresó que las quemas frente a la ciudad bonaerense de San Nicolás, que han afectado directamente la calidad del aire en Rosario. "Es una situación grave", opinó.
Gonnet señaló que los incendios en San Nicolás, que se vienen dando desde hace unas tres semanas, son similares a los que afectaron la zona aledaña a Rosario el año pasado y reclamó un "rol más fuerte de la Justicia", en declaraciones difundidas por La Capital.
En tanto, el secretario de Protección Civil de la provincia de Santa Fe, Roberto Rojas, agregó: "Ante la bajante tan pronunciada del río Paraná nos da mucho trabajo poder contener el fuego. La sequía es terriblemente pronunciada".
"Hay dos operativos armados: uno en Santa Fe capital y otro en San Nicolás, provincia de Buenos Aires. Hay un foco bastante grande que lleva humo, cuando rota el viento, hacia la autopista", remarcó Rojas en declaraciones a Radio Continental.
En los últimos tramos de la entrevista, insiste en que "la bajante impide el acceso por medio del agua y sólo se puede acceder a las islas vía aérea. Eso hace que el trabajo se aún más complicado. Pero bueno, el fuego alguien lo tiene que detener".
Durante 2020, los incendios en esas zonas provocaron graves daños y gran cantidad de humo y cenizas que cubrieron a varias ciudades. Por eso, se iniciaron causas judiciales con la intención de “obtener rebrote como forraje para el ganado y limpieza de la zona".
JFG / ds