Entre los manifestantes que irrumpieron este miércoles en el Capitolio de Estados Unidos, localizado en Washington, Jake Angeli fue unos de los ciudadanos a favor de Donald Trump que destacó por su inusual forma de vestir.
Este hombre de 32 años, con uniforme de "Chamán", ha sido visto en reiteradas protestas a lo largo de país, organizadas con el objetivo de fortalecer la imagen del presidente saliente.
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Angeli es, más que otra cosa, un adepto del movimiento QAnon. Dicho "organización", conformado por integrantes de la extrema derecha estadounidense, asumen la existencia de una supuesta trama secreta liderada por Trump, con el objetivo de desenmascarar a políticos y estrellas de Hollywood, quienes integrarían una red de tráfico y abuso infantil.
Desde 2019, hizo presencia marchas a las afueras del Capitolio de Arizona. En cada una de ellas, reconoció haber sido enviado por "Q", un supuesto agente gubernamental de alto nivel que desveló, a través de foros, pistas crípticas sobre investigaciones secretas efectuadas por el Estado.
Respecto de su vestimenta, reconoció a medios estadounidenses que "usa el gorro de piel, se pinta la cara y camina sin camisa y con pantalones rotos como una forma de llamar la atención"
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