El 19 de noviembre de 2006, hace 15 años, murió el dirigente sindical Saúl Ubaldini. Falleció víctima de un cáncer de pulmón, en la Clínica del Parque donde estaba internado desde mediados de octubre. Estaba a punto de cumplir 70 años.
Su destacada labor consistió en enfrentar al gobierno militar en plena dictadura. En 1977 integró la “Comisión Nacional de los 25” con un grupo de compañeros sindicalistas. Agrupación de expresión combativa contra el gobierno militar, ya que regía la normativa de prohibición de asociaciones gremiales.
Esa Comisión de los 25 dio el primer paro nacional contra la dictadura el 27 de abril de 1979. El paro concluyó con represión y cientos de dirigentes sindicales presos y torturados. No solo se trató de un paro, sino del primer paro hecho a un gobierno militar, enarbolando la bandera de la democracia.
Saúl Ubaldini, sindicalista y rebelde
Su nombre completo era Saúl Edolver Ubaldini y había nacido el 29 de diciembre de 1936, en el barrio porteño de Mataderos, donde transcurrió su vida. Su padre fue Antonio Victoriano Ubaldini y su madre Carmen Guida. Antonio fue mozo y luego operario en el frigorífico Lisandro de la Torre. Doña Carmen fue ama de casa y trabajadora textil.
Saúl Ubaldini cursó estudios secundarios en la Escuela Técnica Número 4. Luego realizó el servicio militar obligatorio en la Marina. Trabajó como cadete, aprendiz de mecánico, empleado en una farmacia. Hasta que en los años 60 ingresó a trabajar en el Frigorífico Lisandro La Torre, allí comenzó la dirigencia sindical, cuando fue elegido delegado.
Ubaldini con su clásico estilo de jean y campera de cuero comenzó a ganar notoriedad, y espacios públicos. En 1978 afirmó: “Debemos comprometer hasta la última gota de nuestra sangre para impedir que se repita otra dictadura que, como ésta sume al país en oprobio, miseria, hambre y dolor de perder a sus mejores hijos, y la democracia es el único medio que conocen los pueblos libres para hacer sus revoluciones en paz”.
En 1979, le hizo el primer paro nacional al Proceso de Reorganización Nacional, más conocido como la dictadura cívico-militar conducida por la Primera Junta Militar de Jorge Videla, Emilio Massera y Orlando Agosti.
En 1979 Ubaldini pasó directamente de la Federación Cervecera a ocupar la secretaría general de la Confederación General de Trabajadores. Se divide la CGT en dos vertientes, CGT Azopardo y CGT Brasil. Ubaldini y Lorenzo Miguel ocuparon la CGT Brasil y el sector 25, asumiendo en diciembre de 1980.
El 7 de diciembre de 1981 desde el barrio porteño de Liniers se convocó a la marcha a favor de “El pan, paz y trabajo a San Cayetano”. Así se constituyó la primera marcha de oposición al gobierno militar.
Jorge Herrera vocal de la Comisión Directiva CTA afirmó: “Yo tenía 18 años cuando participamos de la marcha organizada por Saúl Ubaldini. La marcha de San Cayetano por paz y trabajo, a plaza de Mayo. Saúl se enfrentó a todo el poder, nada más y nada menos que a los militares”.
“No estábamos sindicalizados porque era plena época de la dictadura y los sindicatos estaban intervenidos, nosotros participamos de esa marcha como juventud”, resaltó Herrera, “Después en 1984-85 se recuperó el sindicato y ahí participamos de elecciones, es decir comenzamos a recuperar todo lo que era el sindicalismo. Fue una etapa muy linda porque éramos jóvenes y teníamos toda la polenta encima”.
Realizó 13 paros contra el gobierno de Raúl Alfonsín
En 1986, tras una década de intervenciones, la CGT se normalizó y Saúl Ubaldini fue elegido secretario general, cargo que desempeñaría hasta 1990.
El 14 de noviembre de 1990 organizó la primera movilización contra la política económica del gobierno de Carlos Menem.
Un año después, se postuló por fuera del Partido Justicialista como candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires. Su partido, Acción Popular por la Liberación, obtuvo el 2,2 % de los votos y Eduardo Duhalde resultó ganador.
En 1992, la CGT se reorganizó y Ubaldini quedó afuera de los nuevos cuadros.
Fue electo diputado nacional por Buenos Aires para el período 1997-2001 y luego reelecto para el mismo cargo en el período 2001-2005.
Desde su banca votó a favor de la ley de flexibilización laboral, en septiembre de 1998. No obstante, dos años más tarde, durante la Presidencia de Fernando De la Rúa votará en contra de la “Ley Banelco”, como se conoció la sanción de la ley 25.250, una Ley de Reforma Laboral que destapó el pago de coimas a varios senadores justicialistas para la aprobación de la ley en el Congreso.
Además de integrar comisiones nacionales e internacionales en asuntos laborales, su último cargo fue el de asesor sindical en el gabinete del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido durante la presidencia Néstor Kirchner.
En algún momento dijo: “No me arrepiento jamás de haber sido rebelde ante un proyecto neoliberal”. Tuvo dos matrimonios, tres hijos varones y una campera de cuero que lo hizo famoso –o viceversa-.