El Bolsón se conmociona a raíz del violento atentado reciente que padeció una pareja en una de las cabañas del camping Cumelén. Dos hombres encapuchados ingresaron al complejo con armas de fuego y bidones de nafta: luego de robarles, rociaron al hombre con combustible, lo prendieron fuego y se fugaron. La víctima se salvó, si bien permanece internado, con el 20% de su cuerpo quemado. Estiman que el ataque fue ejecutado por la agrupación Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), por un cartel que dejaron en el lugar antes de huir.
El episodio ocurrió cerca de las 2 de la madrugada del jueves 21, cuando los atacantes con capuchas se internaron en el predio armados y con bidones de nafta. La principal víctima de la agresión fue Pablo Conti, propietario del complejo.
Le rompieron la cabeza con una piedra a un chofer de la línea 57 en el Acceso Oeste
Al llegar al complejo los agresores dispararon contra la vivienda de los cuidadores y a continuación rompieron los vidrios de una ventana, por donde pudieron ingresar a una de las cabañas.
En el interior de la vivienda, los delincuentes amenazaron a la pareja con armas de fuego y exigieron dinero. Sin embargo, en lugar de retirarse del lugar, rociaron al propietario y a la cabaña con combustible y prendieron fuego el lugar.
"Fue un intento de asesinato"
“Nunca dijeron más que dame la plata, callate, te mato”, sostuvo la víctima en declaraciones brindadas a Noticias del Bolsón.
Conti detalló al medio local los detalles escalofriantes del atentado sufrido: los delincuentes lo rociaron con combustible en la parte izquierda de su cuerpo y posteriormente lo prendieron fuego. Si bien el hombre logró controlar las llamas rápidamente, las quemaduras resultantes abarcan un 20 por ciento de su cuerpo.
Mientras huían los delincuentes dispararon dos tiros, rompieron el vidrio de la camioneta y a su vez prendieron fuego el vehículo. “A mí me quisieron matar, fue un intento de asesinato. Tiraron dos tiros, que los encontró la policía”, explicó la víctima.
“El hecho me lo comí yo, pero no creo que haya sido para mí. Fue para alguien a quien le estén reclamando tierras”, expresó Conti.
“El papel apareció arriba, cerca de la ruta. Era como una bolsa con cuatro piedras para que no se vuele”, mencionó Conti al medio local. “Calculo que es para imponer miedo en la zona. No a mí porque no me conocen, no conozco a nadie en El Bolsón. Vivo acá hace un año y medio. No tengo ningún problema con ningún vecino”, agregó.
Los agresores dejaron un cartel en las inmediaciones que permitiría vincular el ataque con la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM).
CA/ED