En Lima, provincia de Buenos Aires, la empresa ADBlick Agro inauguró un invernadero de 1,44 hectárea con 270 mil plantas de frutillas de tres variedades, con el objetivo de producir 300 toneladas por año. El proyecto demandó una inversión de 1,5 millón de dólares y se trata del invernadero hidropónico más grande de Argentina.
Para llevar a cabo este proyecto, se trabajó en conjunto con New Growing System (NGS), una empresa española dedicada exclusivamente al desarrollo de nuevas tecnologías para la producción de cultivos. Además, desde sus comienzos, contó con un comité asesor compuesto por profesionales del INTA que aportan sus conocimientos para poner a punto el sustrato en el que crecen las frutillas.
El invernadero cuenta con una estación meteorológica que permite no solo automatizar la apertura cenital que protege al invernadero de posibles tormentas o vientos fuertes, sino que también es una fuente de información para la toma de decisiones.
Crean una red regional para potenciar nuevas tecnologías en el campo.
Este sistema de ventanas permite que el calor evacue más rápido y que por las ventanas laterales ingrese el aire fresco. De esta manera los días de calor la temperatura es mucho menor que la de otros invernaderos, gracias también a la gran altura que tiene de 8,50 metros. A partir de mediciones instantáneas de temperatura, humedad, radiación, dirección y velocidad del viento se puede ofrecer trazabilidad ambiental a las plantas.
Por otro lado, una computadora de riego brinda otro importante caudal de información como por ejemplo lo relativo al PH, la conductividad eléctrica y los consumos de nutrientes en cada uno de los riegos. Toda esta información se guarda y se encuentra disponible para analizar posteriormente o en tiempo real. De esta forma se puede mejorar día a día la gestión del cultivo, y la toma de decisiones en base a los resultados que se obtuvieron anteriormente en condiciones similares.
Elección de frutillas
Desde ADBlick aseguran que con este sistema de producción se reduce hasta el 100% en el uso de herbicidas, 70% en fungicidas, 50% en insecticidas y del 45% en fertilizantes.
En este momento están focalizados en 3 variedades: Albion, Monterrey y San Andreas lo que les va a permitir tener una oferta permanente. “Estamos muy contentos porque la climatización del invernadero está funcionando muy bien y las plantas responden de manera excelente” explicó Federico Mouso, líder del proyecto.
Alcances comerciales
Recientemente, la empresa comenzó a comercializar las frutillas bajo la marca Zempre en numerosos comercios de la zona y en algunas de las cadenas más importantes de supermercados.
“Nuestra estrategia es 360; vamos a vender a los mercados centrales, en los supermercados, en tiendas minoristas, las verdulerías boutique y de manera directa por internet. La idea es llegar a todos lados”, dijo Ramiro Magallanes, gerente comercial de la compañía.
En un futuro proyectan exportar un tercio de la producción. Demicheli remarcó: “Esto se va a hacer una vez que sepamos que tenemos calidad en tiempo y forma, y podamos prever cómo viene el flujo de calidad y cosecha”.
“Este lanzamiento, responde a una demanda creciente de productos más frescos. Por su cercanía a los centros urbanos, los invernaderos hidropónicos, pueden entregar mercadería de mayor calidad y con cero desperdicios. Su valor puede ser más alto, pero el producto es muy superior en sabor, sanidad y limpieza”, explica Federico Mouso, Líder de ADBlick Hidroponia.
Ventajas de la hidroponia
- Utiliza 90% menos de agua - sistema de producción sustentable.
- Permite la producción cercana a los mercados, reduciendo la huella de carbono.
- Minimiza el uso de agroquímicos (elimina el bromuro de metilo).
- Permite obtener rindes hasta 10 veces mayores que la agricultura tradicional.
- Minimiza el riesgo productivo, con el control de las variables de crecimiento.
- Mayor calidad y uniformidad de la producción.
- Crecimiento más rápido por la atmósfera controlada y la dosificación de nutrientes.
- Permite la automatización y robotización de procesos.
Entre las bondades de este proyecto se destaca la sustentabilidad. Mouso comentó que “no podemos concebir un proyecto sin tener en cuenta su impacto. Los mercados son cada vez más exigentes, y los inversores cada vez más ponderan este criterio en su matriz de decisión”.
LM