Su madre fue la reina del jet set y él domina el cannabis legal en Uruguay

Gunilla von Bismarck, tataranieta nada menos que del canciller Otto von Bismarck, artífice de la unidad alemana y figura clave en el mundo de las relaciones internacionales, era un icono en la movida española de los ´80 y ´90 en la glamourosa Marbella, 

No había tapa de revista ni fiesta que se le resistiera. Dormía de día y de noche no faltaba a cuanto convite hubiese en la ciudad que representaba el lujo y el poder económico en el Mediterráneo. "La reina sin trono de Marbella" fue el apodo para esta sueco-alemana que se casó con un español y tuvo un hijo llamado Francisco.

A Gunilla, su madre, la llamaban "la reina sin trono de Marbella"

El joven Francisco Ortiz von Bismarck no heredó de su madre la inclinación por las fiestas y la noche, sino que trazó una meta en el mundo de los negocios. Esrudió en Harvard y junto con Cameron Winklevoss  crearon la red social Tuenti, que en 2006 vendieron a Telefónica por 70 millones de euros. El socio siempre acusó a Mark Zuckerberg de haberle robado la idea de Facebook. Hoy es uno de los grandes impulsores del BitCoin, Los contactos en su vida fueron siempre a gran nivel, empezando por su madrina de nacimiento la reina Silvia de Suecia. 

Buceando varios negocios diferentes, recaló en el mundo del cannabis lega. Tal como recuerda el diario español El Confidencial, "En 2013, Uruguay se convertía en el primer país del mundo en permitir la producción, venta y distribución de cannabis recreativo. Y el aristócrata lo vio como una oportunidad de oro, ya que cuando el presidente José Mujica otorgó acreditación de producción exclusiva a un número limitado de empresas, una de ellas fue International Cannabis Corp, propiedad de Juan Sartori, amigo y socio de Francisco. Pero tras no fructificar esta asociación, fundó con tres socios Terrace Global Inc, una multinacional con sede en Canadá pero con sus plantaciones en Uruguay. "Terrace Global es un operador multinacional y actualmente trabaja en los mercados de Uruguay, España y Portugal, enfocado en el desarrollo y adquisición de activos cannábicos internacionales", según reza la web de la empresa."

Uruguay se convirtió en el primer país del mundo en legalizar el cannabis recreativo

Francisco Ortiz von Bismarck, explicaba: "tenemos una licencia médica provisional en Portugal, y el año que viene construiremos nuestro invernadero. Entonces la capacidad de producción será de 10 toneladas anuales. Eso equivale a alrededor de tres euros por gramo, por lo que potencialmente hablamos de 30 millones de euros". Esperan que Portugal lo apruebe y que sea la puerta de entrada a toda Europa y por supuesto el joven empresario estarán} ahí para aprovechar el negocio. 

MB/FeL