Una medida de emergencia que permite al Gobierno colombiano adquirir participaciones accionarias en compañías privadas abre la posibilidad al rescate de la aerolínea más grande del país, Avianca Holdings SA, que se acogió al capítulo 11 el mes pasado en medio de un colapso sin precedentes en los viajes.
La nueva regulación, que permite al ejecutivo tomar posiciones minoritarias en empresas que han sido afectadas por la fuerte recesión económica, “puede ser un salvavidas para Avianca”, dijo Carlos Enrique Rodríguez, director de investigación de renta variable en Ultraserfinco SA, una corredora de bolsa.
El decreto que anuncia la medida, publicado en el sitio web de la Presidencia el viernes, no indica cuánto está dispuesto a invertir el Gobierno ni identifica a compañías específicas que podrían ser elegibles. Pero el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, dijo el mes pasado que el Gobierno buscaría ayudar a la aerolínea “de alguna manera”. Según el decreto, el Gobierno “podrá exigir que sus accionistas o propietarios privados garanticen que comprarán la participación del Estado dentro de un plazo determinado”.
Una portavoz de la compañía no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Avianca solicitó la protección del capítulo 11 a acreedores en Nueva York en mayo tras haber paralizado su flota cuando los países latinoamericanos cerraron sus economías para contener la propagación del coronavirus. Colombia prohibió los viajes aéreos a partir de marzo y planea restringir los vuelos internacionales hasta agosto; será una de las prohibiciones más agresivas de la región.
Una vez que los Gobiernos levanten las prohibiciones, Avianca tiene contemplado continuar operando mientras se reestructura bajo protección de bancarrota. Una inversión estatal, que solo podría producirse después de una reestructuración, permitiría a la compañía la continuidad de sus operaciones, mantener los salarios de pilotos y salvar empleos, dijo Rodríguez.
Si bien América Latina se ha visto particularmente afectada con la caída en los vuelos de más de 90% desde comienzo de año, los países han brindado escaso apoyo a las aerolíneas. Latam Airlines Group SA, competidor de Avianca y la aerolínea más grande de la región, también se vio obligada a buscar protección por bancarrota.