Colombia podría comenzar potencialmente a flexibilizar la política monetaria dentro de tres meses mientras la inflación se modere y el peso se estabilice en torno a su nivel actual, según el ministro de Hacienda del país.
Si el precio al consumidor aumenta lentamente de acuerdo con las expectativas durante los próximos seis meses, el Banco de la República podría “fácilmente” reducir su tasa de interés en dos puntos porcentuales para fin de año, dijo el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
“Lo que se espera es que en este mes las tasas se queden quietas y hagamos un proceso de seguimiento a los próximos dos, tres meses para, hacia mes de septiembre, revisar si las tasas pueden empezar a bajar”, comentó el ministro el miércoles en una entrevista en la sede de Bloomberg en Nueva York.
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Los economistas encuestados por Bloomberg pronosticaron que el banco central pondrá fin a su serie más pronunciada de aumentos de tasas de interés en su reunión de política monetaria del 30 de junio. Colombia es la última economía de gran tamaño y con metas de inflación en América Latina en detener el ajuste monetario, mientras que algunas economías más pequeñas, como Uruguay y Costa Rica, ya han comenzado a reducir las tasas de interés a medida que el crecimiento se desacelera en América Latina.
En Colombia, el ministro de Hacienda es un miembro votante de la junta de siete miembros del Banco de la República.
La inflación anual alcanzó su nivel más alto en casi 25 años anteriormente este año, pero Bonilla anticipa que se desacelerará a alrededor del 9% para fines de año.
La lucha del banco central contra los aumentos de los precios al consumidor ha recibido un impulso del peso, que se ha fortalecido un 17% este año, el máximo entre los principales mercados emergentes. Bonilla dijo que prevé que la moneda se estabilice cerca de su nivel actual en alrededor de 4.100 a 4.200 por dólar.
Por otro lado, Bonilla indicó que el Gobierno seguirá eliminando gradualmente los subsidios a la gasolina, lo que probablemente desacelerará la convergencia de la inflación hacia su meta del 3%.
“Tanque lleno”
El Gobierno planea vender cerca de US$1.500 millones en bonos en dólares este año, para prefinanciar su presupuesto de 2024, según su plan financiero publicado este mes.
Hablando junto a Bonilla, el director de Crédito Público, José Roberto Acosta, dijo que tiene sentido vender bonos este año ya que no hay garantía de que las tasas de interés bajen en 2024, y es mejor tener el “tanque lleno” para enfrentar cualquier contingencia.
El crecimiento económico se desacelerará al 1,8% este año, desde el 7,3% el año pasado, según el Ministerio de Hacienda. El Gobierno planea impulsar la inversión en proyectos de obras públicas y construcción de viviendas en alrededor de US$1.000 millones, para tratar de apuntalar el crecimiento en el segundo semestre del año, dijo Bonilla. Actualmente, el Congreso evalúa una adición presupuestal presentada por el Gobierno, que incluye esta propuesta.
Bonilla es un aliado cercano del presidente de izquierda de Colombia, Gustavo Petro, y también se desempeñó como su secretario de Hacienda cuando Petro era alcalde de Bogotá. Bonilla asumió el cargo el mes pasado después de que Petro inesperadamente destituyera del Ministerio al profesor de la Universidad de Columbia, José Antonio Ocampo.
LM