La mayoría de los miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas están presionando por una resolución para abordar el brote de coronavirus, después de que las conversaciones se estancaran la semana pasada debido a un desacuerdo entre Estados Unidos y China sobre los orígenes de la pandemia.
En un esfuerzo por romper el punto muerto, Túnez distribuyó una resolución el miércoles entre los diez miembros rotativos del Consejo de Seguridad de 15 naciones que expresa su preocupación por el brote, apoya el llamado del Secretario General Antonio Guterres a un alto al fuego global y llama a la pandemia “una amenaza para la humanidad y para la paz y la seguridad internacionales”.
La resolución hace un llamado a las naciones para que “brinden protección a los más vulnerables en las zonas de conflicto, especialmente los refugiados, las poblaciones desplazadas, las mujeres, los niños y las personas con discapacidad”, según una copia del texto visto por Bloomberg.
El Consejo de Seguridad no ha podido dar una respuesta unida a la pandemia en las últimas semanas debido a la discordia sobre un intento de Estados Unidos de destacar el rol de Pekín en supuestamente acentuar la crisis global. Los diplomáticos de la ONU ahora buscan programar una reunión sobre el brote para más adelante esta semana o la próxima, dijo el miércoles el embajador de República Dominicana, José Singer, a periodistas.
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