Estados Unidos acusó a la armada china de conducta “peligrosa y poco profesional” en las proximidades de un arrecife ocupado por China en el disputado Mar de China Meridional, en lo que constituye la manifestación más reciente de las tensiones entre estos países en medio de una guerra comercial cada vez más intensa.
Un barco de la Marina estadounidense, el USS Decatur, navegaba “en las cercanías” de los Arrecifes Gaven el domingo, cuando un destructor chino lo enfrentó con “una maniobra peligrosa y poco profesional”, dijo el capitán de corbeta Tim Gorman, portavoz de la Flota del Pacífico de EE.UU. El destructor “se aproximó a menos de 41 metros (45 yardas) de la proa del Decatur, luego de lo cual el Decatur maniobró para evitar una colisión”.
Por su parte, China acusó a EE.UU. de violar su “soberanía indiscutida” sobre la propiedad del Mar de China Meridional -afirmación que se opone a un dictamen de 2016 emitido por una comisión internacional de arbitraje de La Haya-. “Instamos con vehemencia a la parte estadounidense a corregir de inmediato su error y detener actos provocativos de esa índole para no debilitar las relaciones China-Estados Unidos y la paz y la estabilidad regionales”, dijo la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hua Chunying, este martes en un comunicado.
"El destructor “se aproximó a menos de 41 metros (45 yardas) de la proa del Decatur, luego de lo cual el Decatur maniobró para evitar una colisión”.
Si bien la CNN informó sobre la operación el domingo, los detalles referidos a la confrontación salieron a relucir sólo cuando ambas partes emitieron comunicados este martes. Las tensiones militares entre los Estados Unidos y China han crecido en tanto una guerra comercial en vías de agravarse genera en Pekín la inquietud de que los últimos aranceles del presidente Donald Trump sean parte de un plan más amplio destinado a impedir que el país debilite el dominio que ejerce EE.UU. en la región Asia-Pacifico.
Reivindicaciones conflictivas
Pekín reclama para sí más del 80 por ciento del Mar de China Meridional, sobre la base de un mapa de 1947 que muestra puntos vagos -la llamada línea de los nueve puntos-. Otros cinco países, incluidos Vietnam y Filipinas, también han reivindicado su derecho sobre la zona, una de las rutas marítimas más activas del mundo.
EE.UU. no adopta una posición con respecto a las reivindicaciones conflictivas, pero su Armada lleva a cabo regularmente operaciones de libre navegación -conocidas como “FONOP”- enviando buques de guerra y aviones cerca de aguas en disputa para demostrar el derecho a desplazarse a través de lo que considera aguas y espacio aéreo internacionales. El Ejército Popular de Liberación (EPL) ha intentado cuestionar dichos desplazamientos en territorio que considera propiedad de China.
“No sorprende que el EPL cuestione las FONOP cerca de las islas Spratly”, tuiteó Zack Cooper, que estudia la estrategia de defensa estadounidense en Asia en el American Enterprise Institute de Washington. “Este tipo de investigación limitada constituye un intento de impugnar reglas y normas. Fracasa en la medida que continuamos operando”.
El incidente habría contravenido el Código para Encuentros no Planeados en el Mar acordado por China, los Estados Unidos y otros países en 2014, dijo Collin Koh Swee Lean, investigador de la Escuela de Estudios Internacionales S. Rajaratnam de Singapur. El código se propone reducir las probabilidades de accidentes y el riesgo de intensificación en caso de producirse alguno.
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