Exxon Mobil Corp. y Chevron Corp. registraron las mayores ganancias de su historia, cosechando los frutos del aumento de los precios de las materias primas en medio de las interrupciones del suministro y el aumento de la demanda.
Exxon, que superó su récord anterior de ganancias trimestrales en más de US$3.000 millones, advirtió el viernes que los suministros mundiales de energía seguirán siendo escasos y costosos en el futuro cercano. Chevron, por su parte, prometió a los inversionistas un fuerte aumento de las recompras de acciones, aunque advirtió que el costo de hacer negocios subirá.
Los titanes del petróleo norteamericano siguieron a sus pares europeos Shell Plc y TotalEnergies SE, al publicar resultados sin precedentes del segundo trimestre, cuatro meses después de que la invasión rusa a Ucrania desestabilizara los mercados mundiales de productos básicos, agravando una inflación desenfrenada.
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Las acciones de Exxon y Chevron subieron en las operaciones previas a la apertura del mercado estadounidense, continuando la tendencia que ha visto a las acciones petroleras dominar el índice S&P 500 este año.
Las elevadas ganancias del sector petrolero llegan en un momento políticamente complicado para una industria acusada de sacar provecho de las consecuencias de la agresión de Vladímir Putin y de no invertir lo suficiente en nuevas perforaciones.
Aun así, la reciente caída de los precios del crudo y la gasolina puede proporcionar a los ejecutivos del sector petrolero cierta cobertura frente a las críticas que enfrentaron en junio, cuando el presidente Joe Biden acusó a Exxon de ganar “más dinero que Dios”.
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Con el aumento del temor a una recesión, el segundo trimestre puede acabar marcando el punto álgido para las grandes petroleras este año. Los precios internacionales del crudo superaron los US$120 por barril entre abril y junio, un máximo de 14 años, pero desde entonces han caído un 20%. Los márgenes de refinación de Estados Unidos también se han desinflado un poco desde que tocaron máximos históricos, aunque los precios del gas natural siguen siendo elevados en todo el mundo.
Las ganancias ajustadas del segundo trimestre de Exxon, de US$4,14 por acción, superaron la proyección de US$3,98 según el consenso de Bloomberg. La utilidad neta alcanzó los US$17.900 millones, por encima del récord anterior establecido en 2008.
Chevron, por su parte, registró una utilidad de US$11.600 millones que superó en casi un 50% el récord anterior registrado en 2008.
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La división de producción de petróleo y gas natural de Chevron lideró las ganancias con US$8.600 millones, más del doble que un año antes. La refinación también tuvo un trimestre destacado, con un aumento de las ganancias de cuatro veces.
Las ganancias ajustadas por acción de Chevron alcanzaron los US$5,82, informó la compañía con sede en San Ramón en un comunicado, 86 centavos por encima del consenso de Bloomberg. Chevron se comprometió a destinar hasta US$5.000 millones más a la recompra de acciones solo tres meses después de su último aumento.
Sorpresivos resultados
La magnitud de los resultados de las grandes petroleras es una sorpresa incluso para los analistas, que esperaban que el sector registrara un trimestre histórico. También subraya la profundidad de la crisis energética que afecta a las economías de todo el mundo.
El director ejecutivo de Chevron, Mike Wirth, trató de refutar las críticas de que la empresa está lucrando y enriqueciendo a los inversionistas a expensas de los consumidores.
“Duplicamos con creces la inversión en comparación con el año pasado para hacer crecer todas las líneas de negocio de energía tanto tradicionales como nuevas”, dijo Wirth en el comunicado. “Chevron está aumentando el suministro de energía para ayudar a superar los desafíos que enfrentan los mercados globales”, afirmó, refiriéndose a los avances de la compañía en el aumento de la producción de petróleo en la cuenca del Pérmico y la adquisición de un fabricante de combustibles renovables.
El aumento de las recompras indica que Wirth y su equipo esperan que el fuerte flujo de caja se mantenga incluso después de que los precios del petróleo hayan retrocedido un 20% en las últimas semanas. Los ejecutivos de Chevron han insistido en que las recompensas a los accionistas deben ser pagadas de forma consistente a través de los ciclos volátiles de las materias primas y no reducirse cuando los precios de la energía caen.