La candidata a la presidencia de Perú Keiko Fujimori reiteró su acusación de irregularidades en las elecciones del domingo mientras el recuento de votos se acerca a su fin y ella se mantiene levemente más atrás que su oponente.
Con el 99% de los votos escrutados, Fujimori llega a 49,8% y su rival, Pedro Castillo, a 50,2%. Fujimori cuenta con un enorme respaldo de los inversionistas y la comunidad empresarial, mientras que Castillo es más popular entre los pobres, particularmente en las zonas rurales.
Fujimori pidió anular 200.000 votos y revisar otros 300.000.
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“Aquí todavía están en juego 500 mil votos, medio millón de votos a nivel nacional que creemos conveniente que se revisen”, dijo en un comunicado.
Un alto funcionario de la Administración del presidente Joe Biden dijo que Estados Unidos no ha visto evidencia de fraude, solo incidentes aislados de intimidación a votantes.
Si hay una elección libre y justa, “trabajamos con gobiernos de izquierda, centro, derecha, quien sea”, dijo el funcionario, quien pidió no ser identificado porque no están autorizados a hablar en público. “Nos relacionamos con ellos, encontramos formas de trabajar con ellos”.
Castillo, que el martes señaló que había ganado las elecciones, representa al partido marxista Perú Libre, pero en las últimas semanas ha tratado de tranquilizar a los inversionistas y votantes diciendo que no quiere reformar el modelo económico de la nación.
