Los fanáticos de los principales clubes de fútbol de Brasil se están pronunciando en contra de Jair Bolsonaro, el excapitán del ejército que lidera las encuestas de opinión para las elecciones presidenciales de octubre.
Los aficionados del club Palmeiras, de São Paulo, del cual el propio Bolsonaro es hincha, se convirtieron en los últimos en manifestar su oposición al legislador derechista que con frecuencia critica a las minorías, niega que el gobierno militar de Brasil haya sido una dictadura, y cuyas propuestas incluyen armar a la población para combatir la violencia. "No podemos tolerar amenazas a las instituciones democráticas y opiniones racistas, xenófobas, sexistas y homofóbicas", dijeron.
En Río de Janeiro, fanáticos de Flamengo recordaron la dictadura militar de Brasil e instaron a la resistencia en un comunicado emitido con el hashtag #EleNão (#ÉlNo) de una campaña en las redes sociales contra el exmilitar paracaidista. El Internacional, de Porto Alegre, uno de los primeros clubes en promover jugadores profesionales de color, dijo que sería incoherente que sus fanáticos apoyaran a un candidato involucrado en múltiples incidentes racistas.
El manifiesto político sin precedentes en este país obsesionado con el fútbol pone de relieve cómo se están caldeando los ánimos en la carrera más disputada desde el regreso de Brasil a la democracia hace tres décadas.